Etanol.

El gobierno nacional planteó ayer la posibilidad de elevar el corte de biocombustibles con un piso del 20%, tanto para el etanol como para el biodiesel, con el objeto de atender las necesidades que afronta el sector de producción primaria.

El secretario de Agregado de Valor del Ministerio de Agroindustria, Néstor Roulet, refirió que la definición y obtención de una caña de azúcar transgénica podría abrir el camino a elevar el corte de etanol en las naftas «del 12% al 22% o bien al 25%», algo que debería ir unido a la modificación de los motores, similares a los que usa Brasil.

En una rueda de prensa, el funcionario explicó que sobre estas cuestiones Agroindustria está «trabajando» de manera conjunta con Energía, y también con entidades como Adefa y el INTI: «No es inmediato, no de uno o dos años, pero mientras esté la decisión política, se llega«.

El tema será analizado el próximo lunes en el marco de la Mesa Sucroalcoholera, convocada a instancias del decreto 543, firmado por Mauricio Macri el 31 de marzo pasado, que permitió elevar el corte del etanol en las naftas del 10 al 12 por ciento.

Respecto a la situación del biodiesel, Roulet reconoció que el sector productor de biocombustibles «está en una situación difícil» y consignó que desde el ámbito oficial se busca llevar el nivel del corte del 10% actual al 20 por ciento. «Allí es totalmente distinto al caso del etanol, ya que no se necesita la modificación de motores», explicó.

Consultado sobre las demoras registradas en torno a la difusión de una caña de azúcar transgénica creada en Tucumán, Roulet admitió que este evento «está prácticamente a salir» y atribuyó a su demora a «un tema de mercado y este año se va a rever».

Desde Agroindustria admiten la necesidad de sacar un saldo exportable de la producción de caña de azúcar del NOA y allí hacer esfuerzos para incrementar la producción de etanol. «Tenemos actualmente un tope en cuanto a la producción de biocombustible -dijo el secretario de Agregado de Valor-. Nos tenemos que sentar con Adefa (Asociación de Fábricas de Automotores) y decir ‘vamos a pasar de un corte del 12 al 22 o bien del 25’, es decir utilizar el sistema Flex de Brasil».

Y agregó: «12% es el tope que podemos tener en forma momentánea y coyuntural y si nos planteamos elevarlo tenemos que pensar en un salto grande, ya que el salto intermedio la gente de las automotrices y el INTI dicen que es imposible, porque resulta complicado hacer adecuaciones en los actuales motores».

FUENTE: DyN