La campaña gruesa se presenta muy húmeda por la gran cantidad de lluvia registrada durante la segunda quincena de febrero, lo que obliga al productor sojero de la zona nucleo a redoblar sus esfuerzos por mantener el status sanitario de sus cultivos.

Más allá de la compleja situación que presentan muchos campos oleaginosos del sur cordobés, que sufren inundaciones y anegamiento, a esto se le suma la presencia de chinches y también roya asiática, ahora detectada en la zona centro de la provincia de Santa Fe.

Gustavo Ravaglia, analista granario de la firma Kimei, reconoció en diálogo con la agencia de noticias DyN que el sector granario sigue con atención la situación que ofrecen los cultivos oleaginosos, principalmente en la zona sur de Córdoba, Santa Fe y noroeste de la provincia de Buenos Aires.

Allí, los productores de soja -según refirió Ravaglia- están pendientes de sostener el status sanitario de sus cultivos, ya que el exceso de humedad puede acelerar la aparición de plagas o enfermedades que afecten el excelente estado que exhiben los cultivos oleaginosos.

Por lo demás, el valor de la soja logró cerrar ayer en alza a u$s209 por cada tonelada comercializada en los puertos, luego de varios días donde el valor externo de la oleaginosa no paraba de recortar posiciones.

Así es como, según el Mercado a Término de Buenos Aires, concluyó ayer la soja a un precio de u$s208,8 contra entrega de los lotes en abril próximo.

Según datos aportados por investigadores del INTA, ya se habría detectado la aparición de roya asiática en campos de la zona centro de la provincia de Santa Fe, casos que se suman también a los registrados en principio en lotes ubicados próximos a Pergamino y también en la localidad uruguaya de Salto.

En tanto, de acuerdo a informes de la Bolsa de Comercio de Rosario, se mantiene el estado de alarma por la posibilidad de registrarse tormentas violentas en la zona núcleo, y se disparó una «alerta naranja» por los excesos de agua que exhibe la región.

En la segunda quincena de febrero, se reactivaron las lluvias en la zona núcleo, con violentas tormentas que produjeron el ingreso de grandes volúmenes de agua: esto llevó a que volvieran las lagunas y el encharcamiento de campos en las principales áreas agrícolas del país.

En muchas localidades, el agua caída superó los valores históricos registrados en febrero y, según los especialistas de la Bolsa rosarina, ya exhiben «marcas brutales».

En las primeras cinco posiciones se ubican Classon, con la caída de 486 milímetros; Rosario, con 386; Colonia Almada, con 378; Godeken, con 350; y Carlos Pellegrini, con 321 milímetros; cuando el promedio de lluvias en los últimos 55 años rondaban los 100 a 120 milímetros en ese mes.

FUENTE: DyN