La quema de campos al norte del Río Negro alcanzó a 1,3 millón de hectáreas de monte y pasturas, éstas últimas vitales para la hacienda que pudo escapar a los incendios y que sufre la pérdida también de aguadas y alambrados. En tanto, en Santa Fe y Córdoba las inundaciones provocan una nueva crisis en el sector tambero.
Según indicó Dardo Chiesa, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), el incendio de campos afectó a 680 mil hectáreas en La Pampa, otras 350 mil en Río Negro y también 200 mil en el sur de la provincia de Buenos Aires, donde se constata un panorama «desolador» y aún «la mortandad de hacienda se evalúa».
Chiesa, reunido ayer con productores en la localidad pampeana de La Adela, indicó que tras la pérdida de pasturas y la destrucción de aguadas, establecimientos y alambrado «hay que armar la asistencia de alimento a los animales que quedaron: pasto no hay, no hay nada, todo es negro y cenizas».
El presidente de CRA consignó que la pérdida de alambre sobre las rutas 22 y 154 en La Pampa llevó a que la hacienda se mezclara y hasta se la pueda encontrar sobre los caminos.
En otro orden, Chiesa admitió que las inundaciones registradas en la zonas ganaderas del este de Córdoba y sur y centro-oeste de Santa Fe, donde en poco más de una semana se registró la caída de unos 450 milímetros, dejó en «situación acuciante a los tamberos de la zona».
Varias de las áreas lecheras santafesinas y cordobesas ya vienen siendo castigadas por las inundaciones registradas de manera continua desde el 2015, hecho que provocó una fuerte caída de la producción de leche, la pérdida de rodeos y el endeudamiento de los productores.
Desde el Ministerio de Agroindustria informaron ayer que el próximo lunes por la mañana el titular de la cartera, Ricardo Buryaile, junto al viceministro del Interior, Sebastián García de Luca, visitará Santa Rosa, donde será recibido por el gobernador pampeano, Carlos Verna.
Por su parte, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) afirmó que se produjeron «enormes pérdidas económicas y materiales por el avance del fuego en campos del sur bonaerense y de La Pampa«.
Desde la entidad se indicó que los incendios producidos «arrasaron con bosques, cultivos, bienes materiales, casas y animales que quedaron atrapados entre las llamas».
Carbap dispuso centralizar desde Bahía Blanca la asistencia a productores afectados y a fin de articular la reubicación de productores que hayan perdido sus viviendas, el envío de animales a campos con pasto y de fardos o alimento para el ganado.
FUENTE: DyN
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