Tras el congelamiento del Monotributo Social Agropecuario, la Federación Agraria se moviliza frente al Ministerio de Agroindustria de la Nación – ubicado en avenida Paseo Colón entre Estados Unidos y Carlos Calvo – para reclamar contra la decisión del Gobierno Nacional de eliminar el Monotributo Social Agropecuario (MSA): beneficio que permitía que los trabajadores rurales con bajos recursos puedan acceder a aportes jubilatorios y a tener obra social.
Los productores rurales que se ven severamente afectados por los insumos y tarifas dolarizadas que los debilita, tuvieron que sumar la «mala noticia» que los deja de formalizar como trabajadores rurales. Tras la medida que fue implementada por el ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, se calcula que alrededor de 100 mil pequeños productores agropecuarios volverán a quedar en la informalidad. La Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) se adhirió al tractorazo justo a productores porcinos que marcharán para denunciar que se duplicaron las importaciones de carne de cerdo.
La Asociación de Productores Porcinos aseguró que la importación de carne de cerdo aumentó 14,2 % en el primer semestre del año y que esta situación pone en peligro nuevamente a los productores locales. Carlos Ingino, integrante de la comisión directiva de la entidad, reconoció que el panorama «está muy complicado. Parte de las importaciones son provenientes de Brasil. Entran muchos cortes congelados como la bondiola, que equivale al 50 % de todo lo que se está vendiendo en Argentina”, describió. Ingino agrega que esta situación impacta directamente en la producción primaria y la industria argentina y marca una desaceleración del crecimiento de la producción.
Desde la Federación Agraria, aseguran que el tema de agricultura familiar «está bajo revisión todo el tiempo. Principalmente, se advirtió que la quita del Monotributo Social Agropecuario le da más incertidumbre a las producciones familiares, porque no van atener aportes jubilatorios ni obra social. De alguna manera, van a dejar de estar registrados y tendrán que trabajar en negro, conseguir changas o vender en forma clandestina sus productos».
El tractorazo tiene sus razones para paralizar parte de las calles del bajo porteño: la eliminación del Monotributo Social Agropecuaria que afecta directamente a la producción. Sumado a los insumos y tarifas dolarizadas (semillas, herbicidas y combustibles) Más las importaciones y tasas de interés imposibles de pagar por los pequeños productores dejan a este sector productivo en quiebra y bajo una, esperemos no larga, incertidumbre.
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