Los pequeños productores porcinos nucleados en la Federación Agraria Argentina (FAA) reclamaron acciones oficiales para atender la problemática sectorial, tales como un precio sostén y rever la política de importación, el encarecimiento de insumos como el maíz y la carga impositiva que paga el sector.

En un informe difundido por la entidad federada, el productor porcino Daniel Gentile expresó: «Al pequeño productor hace diez o doce años nos dijeron que debíamos ser la góndola de Europa, enviando cerdos y pollos, pero ahora nos traen chanchos de Dinamarca».

Oscar Pestaña, también criador, reconoce que en los últimos años «han desaparecido muchos criaderos: al productor chico no le queda más alternativa que hacer cerdo en establecimientos que rondan las 60 hectáreas; allí el vacuno no es rentable, pero en el campo chico no cierran los números».

Desde la Federación Agraria se reclamó contener la tónica importadora registrada en los primeros meses de 2016 por las compras de carne congelada procedente de Dinamarca y España, y también un precio sostén para el sector.

Campaña para incentivar el consumo de cerdo

Distintas entidades de ganaderos porcinos de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, junto a la Sociedad Rural Argentina y el grupo PORMAG, promueven la necesidad de estimular el consumo de la carne fresca de cerdo.

Respecto a la curva de comercialización porcina, desde septiembre hasta los meses de enero y febrero se registra el mayor nivel de compraventa cárnica del chancho, situación que apuntala los precios durante la temporada estival.

La campaña propuesta por los privados, que busca sumar también al ámbito oficial, apunta a la promoción del consumo entre los meses de abril y julio de 2017, al tiempo que también se debería crear un sello de calidad, que podrá ser instalado en las góndolas.

Actualmente, el precio del maíz ronda los $2.360/ton disponible, mientras que los productores porcinos esperan novedades sobre la próxima cosecha, la cual arrojaría un crecimiento interanual significativo.

La puja exportadora por la obtención de lotes de maíz de la anterior cosecha llevó a muchos productores a quedar fuera del mercado de compras y buscar alternativas para el alimento de sus animales.

Según Gentile, «el pequeño productor de cerdo hoy no está bien y el que no pueda contar con maíz tiene que vender sus cerdos».

Agregó que «el maíz está muy alto, juega negativamente en la producción, el costo sube y no se puede trasladar al público; hoy el consumidor no lo paga, y por ello muchos productores han desarmado sus esquemas de madres reproductoras».

FUENTE: DyN