Las lluvias complican la situación de los cultivos trigueros del sudoeste bonaerense, mientras que la falta de rentabilidad recorta la siembra gruesa de maíz y soja de primera en esta región, indicó ayer Gabriel Foco, economista de la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca.
En diálogo con DyN, Foco consignó que pese a que no se registraron heladas, las precipitaciones continúan perjudicando el desempeño de los trigales del sur de la provincia, que podrían sufrir pérdidas de rinde y calidad por la aparición de enfermedades por exceso de humedad en los suelos.
En tanto, a instancias de un estudio realizado por Iván Ullmann, analista granario de la bolsa bahiense, el especialista expresó que -en el arranque de la siembra de granos gruesos en la región y pese a los buenos niveles de humedad- en doce municipios de la región se constata una caída en la intención de siembra de maíz y soja de primera por falta de precio para estos granos.
Según el estudio, se estima que la superficie total de gruesa caería a 680 mil hectáreas, con una contracción interanual de un 7%: la cobertura del maíz descendería un 10% (a 121 mil hectáreas para el ciclo 2014/15) y el área de soja de primera recortaría también un 10% (reduciéndose a 392 mil hectáreas).
Esto sucedería en el área compuesta por partidos del sudoeste bonaerense como Adolfo Alsina, Guaminí, Puán, Saavedra, Tornquist, Coronel Suárez, Coronel Pringles, Coronel Dorrego, Coronel Rosales, Bahía Blanca, Villarino y Carmen de Patagones.
Los especialistas de la bolsa bahiense indicaron que, pese a las «óptimas condiciones de humedad» en los suelos, la próxima gruesa recortaría su superficie producto de la caída de precios, hecho que «erosiona» la rentabilidad y «limita las expectativas de siembra».
Consultado sobre el efecto que tendrán las últimas lluvias, Foco indicó que «los partidos del sur bonaerense más afectados por las lluvias son Coronel Suárez, Pringles y Dorrego, mientras que en el resto tiene humedad pero no resulta tan grave la situación. Sin embargo, se especula que si sale el sol, con tanta humedad, puede hacer aparecer enfermedades, algo que no es común en nuestra región«.
Agregó que «por ello, el agua de lluvia caída, que este fin de semana fue de entre 15 y 20 milímetros, y que se suman al promedio de 200 caídos días atrás, puede lavar los suelos, y con el nitrógeno traer problemas de calidad y reducir el contenido de proteínas«.
En tanto, respecto al pronóstico de heladas para todo el sur del Río Salado, Foco expresó que «no fue tan grave como se esperaba: en Bahía Blanca no se registraron heladas, y si bien pudo hacer frío en las sierras, este fenómeno no habría afectado» a los cultivos finos y gruesos.
Por efecto de las intensas lluvias, reconoció que los caminos rurales están intransitables, hecho que dificultaría en breve avanzar con la siembra gruesa de segunda, y lamentó que en doce partidos del sudoeste bonaerense se registró un achicamiento de un 7% en la siembra, donde se pasó de 730 mil a 680 mil hectáreas.
«El motivo principal sería la falta de rentabilidad en la mayoría de los granos: la siembra de maíz cae un 10%, la soja de primera también, y el único que aumenta es el girasol», refirió, pero consignó que «se espera que rebote con la siembra de soja de segunda, aunque todo dependerá del clima«.
FUENTE: DyN
04 de noviembre de 2014
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