Dirigentes agropecuarios, economistas y legisladores opositores criticaron la apertura parcial del saldo exportador de trigo y reclamaron «liberar» totalmente las ventas externas y terminar con el sistema de asignación de cupos que «perjudica» el precio que obtiene el productor.

Así se manifestaron los presidentes de Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi; de Confederaciones Rurales Argentina (CRA), Rubén Ferrero; el economista y ex presidente del Banco Central, Martín Redrado, y diputado del PRO, Jorge Srodek.

Por su parte, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, refutó las críticas al justificar que la medida «es de una racionalidad absoluta» porque «garantiza» el cereal «suficiente para abastecer la cadena de valor» y que el pan llegue a «la mesa de los argentinos con un precio conveniente». 

El ministro coordinador alegó que la anunciada autorización para la exportación de medio millón de toneladas de trigo se tomó «verificando la existencia de stock y los niveles de abastecimiento». El Gobierno estimó que en 2014 ese saldo exportador será de 1,5 millones de toneladas.

Buzzi pidió al ministro de Economía, Axel Kicillof, que «deje de ser hipócrita» al defender la política de cupos «con el pretexto de la defensa de la mesa de los argentinos». El dirigente sostuvo que con este esquema se «le transfirieron ganancias fenomenales del bolsillo del productor a seis o siete exportadoras multinacionales», fustigó en declaraciones a radio Mitre.

«Se quedaron con u$s7.000 millones, comprándole barato a los productores y vendiendo en algún momento al mercado internacional, todo eso con el pretexto de la mesa de los argentinos», señaló. En ese marco, reclamó que «dejen que el mercado funcione normalmente de manera tal que los molineros y exportadores tengan que competir y entonces los productores verán el mejor precio posible y en consecuencia sembrarán más trigo, y eso garantizará que no falte trigo en la mesa de los argentinos».

En igual línea, el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Rubén Ferrero, estimó que hay un excedente para exportar de 4 millones de toneladas con lo cual «otorgar un cupo de 500 mil toneladas es más de los mismo; es dar las herramientas para que no se dé la puja entre los compradores«.

«Seguimos con la misma lógica intervencionista que le quita posibilidad al productor agropecuario de tener previsibilidad al momento de la venta y de poder obtener por su producto el precio que le corresponde», lamentó.

Ferrero precisó en declaraciones a radio El Mundo que Argentina tiene un potencial de producción de trigo de 18 millones de toneladas, el doble del nivel actual que ronda los 9,2 millones.

Al respecto, destacó que en un momento en el cual el país «está necesitando divisas», si Argentina hubiera producido un volumen de 18 millones de toneladas de trigo habrían ingresado «u$s3 mil millones» a las arcas nacionales.

«Si seguimos con esta lógica, la superficie sembrada de trigo en 2014 va a ser inferior a la del año pasado, y por ende la cosecha va a ser también inferior», advirtió.

Por su parte, Martín Redrado, actual asesor económico del Frente Renovador (FR), planteó que «el Gobierno es irresponsable al mantener las retenciones porque consolida el estancamiento de la producción en 100 millones de toneladas en los últimos 7 años».

«Hay que animarse a discutir, no a encerrarse en las ideas que nos traen más inflación y parálisis en el empleo», expresó.

A su vez, el diputado macrista Jorge Srodek señaló en un comunicado que «Kicillof es continuador del fracaso de Moreno» y aseguró que «los precios del pan y la harina no paran de subir debido a la inflación que afecta todos los productos de la economía y la producción de trigo disminuye por la falta de reglas claras y previsibilidad».

FUENTE: DyN

15 de enero de 2014