El mercado interno del etanol contaría con espacio para seguir creciendo y ampliando la demanda a instancias de la decisión oficial de aumentar a $13,2 el precio de este biocombustible, hecho que podría disparar la inversión privada en la producción de maíz y caña de azúcar.
Según Martín Fraguío, de la Asociación de Maíz Argentino (Maizar), «finalmente este precio no va a aumentar la capacidad productiva pero es un camino hacia lo que plantea la Secretaría de Agregado de Valor y también el Ministerio de Energía, y es que la Argentina va a tratar de ir a cortes más altos (en las naftas) en el etanol para mejorar el funcionamiento de su parque automotor y el mercado de los combustibles».
Fraguío explicó que con un corte actual de 12% para el caso de las naftas, la Argentina -tal como sucede con otros países de la región, como Paraguay- debe seguir el camino adoptado por Brasil, cuyo valor de corte actualmente se encuentra en un 27 por ciento.
Agregó que dirigirse en esa dirección va a requerir que «la Argentina deba avanzar con la construcción de plantas industriales, lo que representa una inversión muy grande«. No obstante, aseguró: «Creemos que es el modelo ideal para el país: va a llevar años pero la disposición de los inversores está«.
El especialista de Maizar indicó que la decisión oficial de establecer un precio de $13,2, cifra que es un 40% superior al valor que regía en enero de 2016, propone «un número muy interesante» para que la industria productora de etanol pueda pagar sus inversiones, ya que la planta más antigua ronda los tres años.
Según datos oficiales, la producción de bioetanol supera el millón de metros cúbicos, con un aporte de 520 mil de maíz y otros 490 mil metros cúbicos de caña de azúcar.
La recomposición del precio para los productores de etanol era un viejo reclamo que promovía el sector de biocombustibles, especialmente para el caso de los proveedores de maíz, y que finalmente fue dispuesta por Energía.
El sector está regido por la Ley 26.093 de Biocombustibles, la cual fue sancionada en abril de 2006 y finalmente entró en vigencia en enero de 2010 tras el establecimiento de cupos.
«Si aumenta la demanda de naftas en la Argentina o bien aumenta el corte, que para el etanol en las naftas es de 12%, el Gobierno debe fijar y asignar nuevos cupos a las fábricas actuales: hoy todas tienen capacidad ociosa de producción«, refirió Fraguío, quien además reconoció la inversión que está encarando el sector azucarero y también la decisión del sector de maíz de ajustar sus plantas para mejorar su performance.
Parques de energía renovable: se firmaron los primeros contratos
El Ministerio de Energía y Minería anunció ayer que se firmaron los primeros siete contratos correspondientes a proyectos para producir energías renovables adjudicados en la Ronda 1 del Programa RenovAr.
Ellos, se indicó, representan un 28% de la potencia total adjudicada en dicha Ronda, que totalizó 1.142 megavatios.
Cada proyecto suscribió su respectivo Contrato de Abastecimiento de Energía Eléctrica Renovable con CAMMESA (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico), y su acuerdo de adhesión al Fondo para el Desarrollo de Energías Renovables (FODER) con el Ministerio y el Banco de Inversiones y Comercio Exterior (BICE).
Los contratos firmados totalizan 314,95 megavatios, y se refieren a cinco para generación eólica, en Buenos Aires, Chubut y La Rioja; uno de biomasa en Corrientes; y uno de biogás en Córdoba.
Las empresas desarrolladoras de estos proyectos son Biomass Crop, Papelera Mediterránea, Genneia, PAE, Central Puerto y Parque Arauco.
El Ministerio puntualizó además que «se ha notificado al resto de las empresas para proceder a la suscripción de sus respectivos contratos durante las próximas semanas».
El Programa RenovAr cerró el 25 de noviembre con un total de 59 proyectos adjudicados entre las Rondas 1 y 1.5, por un total de 2.423,5 megavatios de potencia a instalar, con un precio promedio ponderado de u$s57,44 por megavatio hora.
La inversión privada será de unos u$s4.000 millones y se crearán 20.000 nuevos puestos de trabajo.
Esta nueva energía se sumará a la generada por los proyectos renovables en operación comercial a la fecha y a la de otros proyectos en marcha, para en conjunto aportar un 9% de la matriz eléctrica nacional hacia finales de 2019.
FUENTE: DyN
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