El dirigente de la Central de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Juan Grabois, sostuvo en declaraciones en El Destape Radio que «hablé relativamente hace poco con Cristina (Fernández de Kirchner), para intercambiar opiniones porque me acusaban de romper silobolsas por los campos. Lo cierto es que no pasó ni se me ocurrió. Yo no quiero distribuir la riqueza, no destruirla. Si me hubiese llevado el silobolsa y hubiese repartido el grano entre los pobres, capaz que la acusación me cabía y hasta la recibía con cierto orgullo de Robin Hood, pero andar rompiendo las cosas no tiene sentido. Yo no estoy de acuerdo con eso».
Según Grabois, los últimos ataques a los granos almacenados se deben a que “es una mezcla de todo, un invento y cosas serias. En la provincia de Buenos Aires me dicen que hay 14 casos, no voy a decir que es un récord impresionante o el virus del vandalismo y los bandoleros rurales que aparecen en la historia, eso es mentira. Puede ser cierto que aparecieron más casos y que algunos pueden tener una motivación de algún pibe que está ‘manijeado’ y hace alguna cag… También es cierto que puede haber alguno que cobra el seguro«.
Para el dirigente social, las acusaciones sobre su responsabilidad en estos hechos delictivos provienen «porque planteamos discusiones que no quieren asumir, cuando uno plantea la reforma agraria y que la estructura agraria en la Argentina está mal porque reprimariza la economía».
Grabois no es muy enfático con el atentado al campo: solo es un sin sentido. Hasta sigue poniendo dudas y sostiene que hay cosas que no son ciertas o que los propios chacareros rompen los silos o queman lotes para cobrar el seguro (!). Así contribuye a la paz social y política este enviado papal. Después leemos que Francisco está preocupado por el hambre en el mundo y nada dijo hasta ahora de esta vergüenza argentina. No hay país en el mundo donde se dañe depósitos de comida, solo aquí y desde la 125 ¿extraño? para nada.