La industria molinera espera exportar en los próximos dos años dos millones de toneladas de harina de trigo, con lo que se crearían 183.000 nuevos puestos de trabajo y se generarían ingresos adicionales por u$s5.300 millones.

Así lo sostuvo el presidente de la Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM), Diego Cifarelli, quien destacó que el desarrollo de la agroindustria es un aspecto fundamental para el crecimiento del país, ya que emplea cerca de 2 millones de personas que significan el 70% del total de puestos de trabajo generados por las cadenas agroalimentarias.

Cifarelli resaltó que la Argentina puede producir 2,5 veces lo que consume, por lo que el objetivo es potenciar la salida exportadora.

En ese sentido, precisó en un comunicado que en 2016 se obtuvieron u$s57.737 millones por los envíos al exterior, cifra que representa un 40% de las exportaciones totales del país.

Durante la campaña 2016/ 17 se produjeron 18,39 millones de toneladas de trigo en la Argentina, y se espera alcanzar 20 millones, añadió.

El desafío, señaló Cifarelli, es saber aprovechar esa producción y aumentar exponencialmente las exportaciones de harina, un producto agroindustrial ampliamente valorado en el mundo. Al respecto, recordó que en 2016 se exportaron 625.086 toneladas de harina y destacó que la meta para el próximo bienio es colocar 2 millones de toneladas de harina argentina en el mundo. «Si alcanzamos ese objetivo y los demás eslabones de la cadena hacen lo propio significaría 183.000 nuevos puestos de trabajo e ingresos adicionales de u$s5.300 millones», explicó Cifarelli.

El presidente de FAIM agregó: «La Argentina tiene el potencial necesario para convertirse en el ‘supermercado del mundo’ y estamos en el camino correcto para que eso suceda», por lo que solicitó «una intervención inteligente del Estado Nacional sobre cada sector para darle a cada uno la competitividad necesaria».

FUENTE: DyN