La belleza natural del paisaje ondulado que caracteriza a Entre Ríos predispone la degradación de los suelos. Para los expertos del INTA, el desafío es diseñar técnicas para el control de la erosión hídrica. En este sentido, la construcción de terrazas ayuda a sistematizar los lotes y aportan sustentabilidad a la agricultura.
Para Jorge Gvozdenovich, especialista en conservación de suelos de INTA-Paraná, “la sistematización de los lotes con terrazas de evacuación es una estrategia sustentable para una región que tiene características geográficas complejas”.
La erosión hídrica es uno de los principales problemas que afectan a la producción debido a que degrada los suelos y reduce los rindes de los cultivos. “Es fundamental generar conciencia sobre la importancia de la conservación del suelo porque la erosión se lleva la tierra más productiva que tenemos”, señaló.
De acuerdo con Gvozdenovich, la experimental del INTA en Paraná es pionera en el desarrollo de tecnologías para el control de erosión hídrica. “La construcción de terrazas en los lotes hoy representa el 21% del área agrícola provincial”, destacó, al tiempo que agregó: “Para que el sistema productivo sea sustentable el productor tiene que conocer el costo oculto que hay detrás de cada hectárea de tierra trabajada”.
Estimaciones de la FAO indican que unos 1.500 millones de hectáreas corresponden a suelos cultivados, lo que representa sólo un 11% de la superficie del planeta. De acuerdo con el organismo internacional, se espera que en los próximos 20 años más del 80% de la expansión de la superficie cultivada se produzca en América Latina y África Subsahariana.
El suelo es la base de la agricultura y es clave para la producción de alimentos. Dante Bedendo, especialista en cartografía digital del INTA, indicó que “el 50% de la superficie provincial está afectada por la erosión, lo que representan casi cuatro millones de hectáreas”.
En este sentido, advirtió que es imprescindible contar con un diagnóstico actualizado sobre el estado de los recursos en la provincia. “Con esta información el productor puede diseñar estrategias de manejo que protejan los suelos y ayuden a prevenir la erosión”, agregó.
FUENTE: INTA Informa
Además de canales que capten las escorrentías de las terrazas para encausarlas hacia cursos naturales como arroyos o ríos, también habría que explorar en topografías donde no se encuentren cursos próximos, derivarlas a pozos para alimentar napas de cierta profundidad, como se hace en la denominada «cosecha de agua».