El Centro de Corredores de Cereales de Rosario reclamó ayer al futuro presidente que «revise la actual política agropecuaria» y en particular que derogue la resolución de la ex Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca) que «desvirtuó la transparencia de los mercados de trigo y maíz«.
En un documento titulado «Federalismo en serio», el Centro hizo un llamado a las futuras autoridades que surjan del balotaje del 22 de noviembre para que revisen «la actual política agropecuaria, de manera de aliviar la grave situación en que se encuentran las economías regionales y los mercados granarios».
«Es necesario tomar medidas urgentes, que reviertan la dramática situación en que se encuentra el interior productivo del país, y hacemos votos para que los candidatos cumplan con las promesas de federalismo formuladas a lo largo de sus campañas, poniendo en el mismo nivel de prioridades las problemáticas que afectan al interior, hoy relegado a su mínima expresión», señaló la entidad.
Al respecto, los cerealistas advirtieron que en la actualidad se asiste «a un escenario complicado, producto de la intervención oficial de los mercados granarios, que comenzó en el año 2006 con el mercado de trigo, y se profundizó a partir del año 2008 con la Resolución 543 de la ex Oncca».
Ese organismo fue disuelto en febrero de 2011 y sus funciones se traspasaron a la Unidad de Coordinación y Evaluación de Subsidios al Consumo Interno.
De acuerdo con el Centro de Corredores de Cereales de Rosario, esa resolución del organismo disuelto «desvirtuó la transparencia de los mercados de trigo y maíz, convirtiendo al ROE Verde en una licencia previa de exportación no automática».
«Esto impidió la competencia entre la demanda interna y la exportación, en detrimento del normal funcionamiento de los mercados, y afectó el proceso de descubrimiento de precios representativos y transparentes», añadió.
En consecuencia, el Centro reclamó la derogación de la RG 543, «que lleva varios años en vigencia, causando graves daños al normal desarrollo de los mercados y a la cadena de producción y comercialización en su conjunto, volviéndose insostenible, en un contexto de subas de costos internos y caída de los precios internacionales».
«Queremos un mercado para todos, y no para unos pocos. Un mercado que iguale y no que expulse», finalizó.
FUENTE: DyN
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