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La producción láctea sufre actualmente el recorte en su actividad por el valor de la materia prima que envía a las industrias, aunque se vería beneficiada en el mediano plazo por los subsidios oficiales y la tónica ascendente que experimentaría la exportación de leche en polvo.

Así lo indicó ayer el coordinador de la Mesa Nacional de Productores Lecheros (MNPL), Carlos Brave, quien confirmó que «algunas» usinas lácteas «han anunciado que bajarán sus precios de compra de $2,5 a $2,3 por litro de leche cruda».

Sin embargo, Brave ponderó la suba de un 12,9% que experimentó el valor pagado internacionalmente por lotes de leche en polvo, que llevó su precio hasta los u$s2.800, hecho que podría dar aire a la industria para apuntalar el valor pagado a los tambos.

El referente del sector destacó además que se avanzará con el pago de los subsidios a productores de hasta 6.000 mil litros que se hubieran registrado ante la Secretaría de Comercio, sobre los primeros 2.900 litros diarios del mes de junio pasado.

«Salió el decreto para pagar los 30 centavos (de compensación) para los primeros 2.900 litros, por junio, algo que beneficia a casi el 50% de los productores lecheros, es decir, casi unos 5.000 tambos», explicó Brave.

Esto, sumado a la decisión de las empresas industriales de tratar de sostener el precio de la leche cruda sobre fin de año, trae cierta tranquilidad a un sector que actualmente exhibe quebrantos en su actividad producto del recorte dispuesto en los precios de las materias primas y la caída de la actividad.

Según trascendió, desde el sector fabril apuestan a que se sostenga el incremento que están experimentando los valores internacionales de la leche en polvo, que ayer subió a un precio de u$s2.800 y que esperan que a marzo-abril trepe a u$s3.100, cifra que aún se ubicaría lejos de los u$s5.000 que supo presentar tiempo atrás.

FUENTE: DyN