La Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (Ciccra) criticó ayer la política ganadera impulsada desde el 2006 y calificó como «imprescindible» instrumentar una «mejora del tipo de cambio efectivo para las exportaciones» cárnicas, «sin apelar a saltos devaluatorios y sin afectar el aporte sectorial actual».
Así lo indicó la entidad dirigida por Miguel Schiariti en su informe sectorial del mes de febrero, donde consignó que «las consecuencias negativas de la política económica que viene implementado el gobierno nacional en los últimos años van creciendo en cantidad y visibilidad».
Para los frigoríficos nucleados en esta cámara, «existen mecanismos» para estimular las ventas al exterior y devolver rentabilidad al sector «sin apelar a saltos devaluatorios y sin afectar el aporte sectorial actual» al fisco.
Ciccra objetó en su informe la estrategia «intervencionista» adoptada por la administración kirchnerista desde el 2006, que a su juicio «colocó al sector al borde de la asfixia» y que redujo en 12,3 millones de cabezas el stock ganadero bovino entre el 2007 y 2011, desde cuando se logró recuperar unos 3,6 millones.
La entidad aseguró además que el tipo de «cambio administrado», junto con «una política monetaria súper expansiva», terminó por colocar al sector «en un contexto de muy alta inflación que carcomió progresivamente la competitividad de nuestra carne en los mercados internacionales», derivando en una pérdida de terreno en el orden internacional frente a mercados crecientes como Uruguay, Paraguay o Brasil, y a otros competidores ganaderos.
«Nuestro bife viene perdiendo una significativa cuota de competitividad en relación al de los principales competidores: en sólo cuatro años la pérdida relativa fue de 10,7% con Uruguay, de 14,5% con Nueva Zelanda, de 28,7% con Australia y de 37,1% con Brasil», indicó Ciccra.
La cámara que nuclea a frigoríficos recordó que el sector cárnico paga un 15% en derechos de exportación y además enfrenta un contexto internacional con una revaluación del dólar estadounidense, que encaró desde fines del 2014.
«Por todo lo expuesto -dijo Ciccra-, para lograr que las empresas exportadoras lleguen hasta el final de este gobierno en condiciones de seguir operando es imprescindible que se mejore el tipo de cambio efectivo para nuestras exportaciones«.
Añadió que «existen mecanismos para lograrlo sin apelar a saltos devaluatorios y sin afectar el aporte sectorial actual» y expresó que esto evitaría la pérdida de puestos de trabajo y el cierre de plantas.
FUENTE: DyN
Twitter
Facebook
G Plus