El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Carlos Casamiquela, participó del 57 aniversario del INTA en el marco del acto por los 100 años de la radicación de la estación experimental agropecuaria del Alto Valle, en la provincia de Río Negro.

Durante su discurso, Casamiquela destacó las líneas de gestión que llevará adelante desde la cartera agropecuaria junto a su equipo de trabajo. Aseguró que «el Ministerio va a trabajar en el diseño de políticas públicas que básicamente estén direccionadas a mejorar la calidad de vida de la gente, y me refiero a la sociedad argentina en su conjunto, y en instrumentos que nos permitan posicionar al país como productor de alimentos».

Entre otros aspectos, el MinAgri apuntará a la innovación como síntesis del desarrollo territorial y la investigación, priorizando la soberanía alimentaria, a los productores de pequeña y mediana escala, el agregado de valor en origen, la agroindustria y el fortalecimiento de las economías regionales.

«El Ministerio ha decidido trabajar con una mirada hacia el 2030, pensando que el futuro no se espera, el futuro se construye. Tenemos una enorme capacidad de reaccionar hacia determinados estímulos y generar hoy un importante proceso de transformación», especialmente teniendo en cuenta que «más del 50% de las exportaciones de nuestro país responden al sector agropecuario y agroalimentario», sostuvo el funcionario.

A su vez, informó que se avanzará «en la solución de los problemas argentinos, trabajando y articulando con los países del Mercosur«. «Esta región es hoy el mayor reservorio y tiene las capacidades de generación de materia y de proteína vegetal del mundo. Además, cuenta con tres elementos que la destacan: agua, suelo y gente que sabe hacer las cosas», opinó el ministro.

Casamiquela remarcó que van a profundizar el enfoque de gestión en la «competitividad», pero coherente con el ámbito y desarrollo social, «haciendo que los productores tengan una justa retribución por sus productos y que los consumidores adquieran alimentos a precios razonables y de calidad».

De la celebración también participaron los gobernadores de Río Negro, Alberto Weretilneck; de Neuquén, Jorge Sapag; el vicepresidente en ejercicio de la presidencia del INTA, Francisco Anglesio; el director del Instituto, Eliseo Monti; y autoridades nacionales y provinciales.

En ese contexto, el gobernador Weretilneck sostuvo: «El INTA está más vigente que nunca en lo que es el rol del Estado, acompañando, guiando, compartiendo experiencias con nuestros productores, por eso estamos presentes hoy aquí, como testimonio de la importancia que tiene el mundo de la producción para la provincia de Río Negro».

«La creación de esta estación marcó el avance de la tecnología y del acompañamiento que tienen los productores con un instituto como el INTA», subrayó Weretilneck.

Por su parte, el gobernador de Neuquén, Jorge Sapag, destacó la trayectoria de Casamiquela. «Conoce a nuestro territorio, nuestras familias, nuestros problemas y es con quien podemos hablar con sentimientos comunes», opinó.

A su vez, remarcó: «Tenemos un desafió histórico de hacer una Nación soberana, y tenemos todas las herramientas para hacerlo».

Casamiquela le dedicó casi 40 años de su carrera al INTA y que lo presidió desde 2009 hasta hace unas semanas, cuando asumió en la cartera nacional.

Estación experimental

El edificio fue construido por el Padre Alejandro Stefenelli. Allí funcionó como capilla y galpón, a partir de 1908, la Escuela Práctica de Agricultura San José.

En 1913, el Ministerio de Agricultura y Ganadería de la Nación la transformó en la Chacra Experimental de Río Negro, primera iniciativa estatal de desarrollo agropecuario en el Alto Valle. Durante un primer período fue bodega, sector de extracción de miel y lechería.

A partir de 1958 se integró al Centro Regional Rionegrense, estructura del recién creado INTA.

Llegado 1963, las experimentales de J.J. Gómez y la de Cinco Saltos se unificaron bajo el nombre Estación Experimental Agropecuaria Alto Valle.