El estudio fue realizado por la Fundación Idear, y confirmó los daños en el sector de los carozos -duraznos, ciruelas, cerezas y damascos- en Mendoza, tras las intensas heladas sufridas entre julio y principios de septiembre.

En esa provincia existen 55 mil hectáreas cultivadas con frutales, lo que equivale a un 22% de su superficie productiva. De ese total, 39.400 corresponden a cultivos de carozos.

El informe, con fecha octubre de 2013, asegura que los duraznos frescos y para la industria reportan una pérdida del 85%, al igual que la ciruela en fresco. En tanto, se dañó un 35% de la ciruela para la industria, el 75% de las cerezas y el 90% de los damascos.

En tanto, señala que considerando solamente el Valor Bruto de la Producción (VBP) respecto de la base de la cosecha anterior, las pérdidas en el sector primario alcanzarían los $743 millones. Las regiones Sur (General Alvear y San Rafael) y el Valle de Uco son las zonas más afectadas. Allí, la fruticultura representa un 46,3% y un 30,9%, respectivamente, de la superficie total, y las pérdidas se traducirían en casi $320 millones y $190 millones.

Otra de las consecuencias que registra el informe respecto de las heladas es la disminución de la oferta laboral. Los trabajadores rurales dejarían de percibir un total de $625 millones entre noviembre de 2013 y marzo de 2014, señala.

Se estima que las mayores pérdidas de puestos de trabajo tendrán lugar el próximo enero, y alcanzará a 10.600 personas. La causa central es que no se necesitará tanta mano de obra para la cosecha de duraznos y ciruelas.

El informe también señala que no se industrializarán carozos por un total de $1.345 millones, de los cuales un 48% corresponden a la manufactura de duraznos, un 22% al empaque de duraznos y un 16% a la industria deshidratadora de ciruelas.

“Este VBP incluye la materia prima, los insumos industriales, el empleo industrial y la renta de los propietarios de la industria. Si se descuenta el VBP de la materia prima y el consumo intermedio de insumos industriales, el valor perdido entre trabajadores e industriales alcanzaría a $321 millones aproximadamente”, asegura el estudio.

Por su parte, destaca que existe el Fondo Agrícola Solidario (FAS) como medida de apoyo a los productores afectados por las heladas. «Es un fideicomiso conformado por el aporte de fondos del Estado y de los productores, orientado a compensar, en parte, los daños provocados por las contingencias climáticas, acercando la compensación recibida al valor real del costo de la producción”, explica el informe.

Agrega luego que “la participación de los productores es voluntaria. No obstante, mientras mayor sea la participación de los productores mayor es la posibilidad de cobertura del sistema y da la posibilidad de que los productores afectados anualmente por el granizo y heladas puedan recibir un monto suficiente para afrontar los costos de una nueva temporada y no descapitalizarse, siempre y cuando el daño constatado sea mayor o igual al 50%”.

No obstante, de acuerdo al gobierno provincial, se dispondrán de cerca de $36 millones, entre aportes de productores y del Estado, y se pedirán a Nación otros $40 millones. Estos $76 millones del FAS, según el estudio, se corresponderían solamente con un 10% del VBP perdido por los productores primarios de frutas de carozo.

El informe concluye que, si bien el FAS ayuda, “no cumple plenamente con el objetivo de cubrir a los productores para que durante la campaña agrícola posterior sigan trabajando sin tener que endeudarse o descapitalizarse”.