La Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (APYMEL) cumple 3 décadas destinadas a lo que mejor sabe hacer: representar y trabajar junto a las PyMEs lácteas del país que se ven desprotegidas y donde el asociativismo es la unión clave entre los productores y la entidad. Apymel se formó en 1988 en el partido de Navarro, Buenos Aires, cuando un grupo de tamberos se decidieron a incursionar en la industria lechera y lograr mayor competitividad.
Super CAMPO dialogó con su presidente, Pablo Villano, que brindó un panorama general de la cadena, los principales beneficios y actividades de los socios de Apymel, reclamos y logros. Ahora, la función de la Asociación es interceder por las pymes en todos los ámbitos ya sea con los organismos nacionales, provinciales o municipales y coordinando las diversas actividades en conjunto. “Cuando decidimos darle un vuelo mayor a Apymel, que había comenzado en Buenos Aires, la hicimos más nacional que nunca. Ahora, hay 5 sedes: Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y La Pampa. Contamos con 170 socios, pero representamos a más de 600 pymes existentes en el país”, aseguró Pablo Villano y añadió que “respecto al servicio para los socios, cada vez estamos más comprometidos y organizamos la reunión de Comisión Directiva Nacional los últimos jueves de cada mes y a su vez más reuniones provinciales”.
Apymel tiene una administración nacional, un equipo de formadores y un alto conocimiento de la situación de cada trabajador. Casi el 90% de las empresas socias elaboran hasta 50 mil litros diarios de leche y 82% tiene hasta 50 empleados. Son empleadores de mano de obra intensiva y generadoras de puestos de trabajo en sus comunidades.
PLATAFORMA COMEX. Para promover la exportación, Apymel desarrolló una plataforma que comenzó en 2012 con apenas cinco empresas nacionales que estaban aptas para exportar sus productos. “Así comenzaron a realizar gestiones con gerentes de exportación para participar en ferias internacionales y visibilizar la calidad de los productos regionales de la cadena. Las diversas reuniones llevaron a concretar un armado de un e-commerce para negociar las ventas en el exterior”, señaló Pablo Villano.
Hoy, la plataforma tiene 38 empresas habilitadas y al menos 30 empresas que se encuentran exportando. “Con esta plataforma tenemos vínculo directo con el Consejo Federal de Inversiones (CFI) y con la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional, conocida como Fundación ExportAR. Esto nos permitió asistir a más de 20 ferias y exportar a más de 20 países”, agregó Villano. Los números de Apymel indican que van a llegar a los 100 millones de dólares en exportación (donde comenzaron con 0) y a las 20 mil toneladas de leche en polvo y quesos (habían empezado con 200).
OPORTUNIDADES. Para ser socio de la plataforma de exportación, la pyme interesada debe pasar por la aprobación de la Comisión Directiva como mecanismo formal. Se puede ser socio de Apymel y, aparte, asociarse a la plataforma ya que el productor encontrará otra estructura de servicio y otro arancel. Además, entran firmas como Adeco Agro está por comprar dos plantas de Sancor y produce 300 mil litros de leche. Pero, la firma se inscribió como socio adherente y como nuevo miembro de la plataforma de exportación. “La plataforma, con casi 40 socios, nos permitió adelantar la brecha. La mediana empresa es la que se agrandó -en cuanto númerosgracias a la existencia de esta herramienta que les permitió exportar. En las ferias internacionales logramos que el CFI y ExportAR nos acompañen o viaje algún gerente de exportación para hacer contactos y generar más ventas”, resaltó Pablo Villano.
Un ejemplo de los resultados de exportación: En 2015, “LacteAR” vendió un container de queso cheddar a Vietnam. Y este año, compraron dos contenedores. A pesar de la coyuntura económica, déficit y recambio del mercado estos hechos hacen saber que los lácteos argentinos se producen con excelente calidad.
Asimismo, la Asociación desarrolla estrategias en el mercado interno para agilizar la comercialización, ya que los socios se quejaban de no poder vender directamente sus productos. Así, y hace cuatro años, comenzaron a organizar la “Semana del Queso” cada noviembre. “Esto hizo que varias pymes se animen a dar un paso más. Abrieron locales propios para visibilizar las marcas elaboradas por cada pyme, además de eliminar un intermediario, mejorar el precio de la pyme y el poder de compra para competir frente a las grandes marcas del mercado”, afirmó el presidente sobre la iniciativa. Esta posibilidad hizo que el consumidor conozca segundas y hasta terceras marcas y las pymes tuvieron la oportunidad de ingresar a las cadenas de supermercados.
En octubre, las pymes exportadoras se presentaron en SIAL París, una de las ferias más importantes de la industria alimentaria, donde los socios ofrecieron sus productos a los potenciales compradores del mundo. Este año participaron Sobrero y Cagnolo, Pampa Cheese, Santa Clara, Adeco Agro, Lactear y de la plataforma APYMEL en representación de las empresas: Cremigal, La Varense, Mafralac, Lacteos Tonutti, Vacalin y Remotti.
PANORAMA. La situación de crisis de la cadena, era peor antes de la devaluación, aunque ahora se agravó el mercado interno y los productores se quejan por las deudas ya que sus costos subieron. No se pueden arrastrar los costos. Hay diálogo constante con los socios que, para Apymel, la relación es estrecha.
Respecto a las ventas, desde el Observatorio de la Cadena Láctea, aclararon que los últimos números informados para enero-julio 2018 vs. igual periodo del año anterior presentan una disminución del 1,9% en volumen de productos y del -1,8% en litros de leche equivalentes (2,7% en fluidas, -5,9% en polvos, -0,1% en quesos y +0,2% en otros productos). “Está sobrando producción. Se vende toda la leche y no permitimos deteriorar el precio al producto. Al contrario, estábamos en $7,50 en septiembre, $8 en octubre y $8,50 en noviembre, eso es lo que se estima en cuanto al precio de la leche. La exportación está traccionando el precio”, aclaró Villano. La exportación subió 30%, como el mercado externo representa menos del 20% del mercado total, la cuenta indica que lo que subió en producción se lo llevó la exportación. Las pymes más débiles buscan maneras de fortalecer cada vez más sus marcas.
CRISIS. La Asociación propone enfrentar el impacto de la recesión económica y reclama que las retenciones a las exportaciones sean diferenciadas tanto para la escala de industrialización como para los productos para atenuar el costo del financiamiento. Que bajen las retenciones del 3%, haciendo retenciones diferenciadas para pymes y los productos, no es lo mismo la Leche en polvo que los quesos. “Hay empresas que están endeudadas, donde, salvo las multinacionales, vemos al resto muy desprotegidos. Las pymes lácteas representamos el 92% de la industria láctea nacional y cerca del 80 % son pymes de menos de 20 empleados y más del 60% de las industrias están ubicadas en pueblos de menos de 12 mil habitantes”, expresan desde Apymel.
La mayor preocupación es la tasa de interés, un problema para el que está endeudado como para el que necesita Capital de trabajo. La cadena de pagos se extendió a 80, 90 y 120 días y no se pueden descontar los cheques. A los Bancos les aumentaron los encajes, pero les permitieron ponerlos en bonos. “Proponemos que parte de la renta de esos bonos se use para bajar las tasas de préstamos a las
pymes y que estipule un porcentaje de la cartera de los bancos sea prestable a las pymes. También se puede pensar en créditos en dólares a tasa cero, ya que nuestros insumos están dolarizados”.
MÁS OPORTUNIDADES. Asi como Apymel ayuda a todos los emprendimientos lácteos, hay un nuevo programa de Fontar para Pymes lácteas: Enfocar.Te es un interesante modelo de gestión armado por el Fondo Tecnológico Argentino para el financiamiento de PyMEs lácteas. El concurso cierra el 18 de diciembre.
Por Ángeles Ruiz para Super CAMPO.
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