El miedo de los productores de que el intenso frío y heladas registrados desde el viernes pasado en la principal zona agrícola del país afecten al trigo recién sembrado fue disipado por los especialistas en clima, quienes aseguraron que no tendrán ninguna influencia negativa sobre la cosecha.

Dado que la implantación de soja aún no comenzó y la del maíz es incipiente, la principal preocupación ante el clima adverso se centró en el trigo del ciclo 2013/14, sobre todo luego que sus futuros pegaran un salto ayer en el mercado de Chicago, en los Estados Unidos, impulsados por las alzas en otros granos y el mal tiempo en el país del norte.

Los expertos señalaron a la agencia de noticias Reuters que aún es muy temprano para que el frío y las heladas perjudiquen los cultivos.

Germán Heinzenknecht, meteorólogo de la Consultora de Climatología Aplicada, aseguró que “el frío que ahora parece preocupante es relativamente normal. El nivel de frío fue intenso, pero en esta época del año no afecta al trigo. Lo retrasa un poco, pero nada más”.

En cambio, si esta situación climática se repitiera en la segunda quincena de septiembre, el cuadro sería diferente. “Ahí entran en floración los trigos en el norte de Buenos Aires, sudoeste de Entre Ríos y Sur de Santa Fe”, por lo que una ola polar sería fatal.

Las heladas alcanzaron temperaturas de hasta -8°C en la mayor región productora de granos del país, que abarca las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos.

De acuerdo a datos oficiales, para la temporada 2013/14 los agricultores nacionales sembraron 3,9 millones de hectáreas de trigo.

En julio, las heladas que cayeron sobre el estado brasileño de Paraná, principal productor de este cereal de ese país, llevaron a un recorte de 1,98 millones de toneladas en la cosecha prevista, cantidad relevante si se considera que se estimaba un resultado de 2,7 millones, según lo informado por la agencia de alimentos Conab.

En tanto, meteorólogos argentinos informaron que el intenso frío y las heladas continuarán hasta mañana, aunque disminuirán su intensidad.