Mientras ya pasaron dos semanas del inicio de la crisis de la carne en Brasil, a raíz de la revelación de la denuncia de la Policía Federal sobre un esquema de corrupción entre frigoríficos y funcionarios del servicio sanitario oficial, en los últimos días comenzaron a aparecer buenas noticias para ese país. Lo más importante fue la reapertura de importantes mercados para sus carnes como China, Chile, Egipto y Hong Kong.

En tanto, se supo que el servicio federal brasileño decidió sumar otras tres plantas a los cierres dictados inicialmente, con lo que suman seis las interdictas y quedan otras 15 bajo vigilancia extrema.
El comisionado europeo de Sanidad está terminando una visita de tres días a Brasil, para asegurarse los procedimientos que evitarían la repetición del problema denunciado. Todavía no se conocen los resultados.

El regreso, en cifras

Según números recién conocidos, las exportaciones de carnes vacunas en el período del 13 al 19 de marzo fueron de u$s14 millones diarios de promedio por 3447 t/día, cantidades muy similares a las registradas antes de la denuncia del día 17 (u$s13,4 millones y 3248 t/día para los primeros 12 días del mes).

Para la semana del 20 al 26 de marzo, los embarques cayeron a poco más de la mitad (u$s8 millones y 2000 t/día). Estos números son mucho más representativos que el que dio vueltas por todo el mundo y que indicaba que de u$s63 millones diarios se cayó a u$s74 mil, cifra que hacía referencia al registro de un solo día (22 de marzo), ni bien estalló la crisis.

El precio de los novillos gordos cayó 2% ante la abrupta caída en la demanda para faena.

Bajo la lupa

Hace algunos días, el diario Valor Económico informó que la Unión Europea resolvió hacer un examen físico de la carne exportada por Brasil en el 100% de los cargamentos provenientes de las 260 plantas habilitadas para ese mercado de todas las especies -además de análisis microbiológios al 20% – y no sólo para las 21 plantas incluidas en la denuncia de la Policía Federal. En caso de encontrarse problemas, se dispara un mecanismo inmediato y automático que somete esa carga a un monitoreo aún más duro.

No obstante, en Brasil se considera que esta decisión es favorable, ya que existía gran presión para suspender totalmente las importaciones de carne brasileña.

Lo más destacado es que, sin una mejora notable en la comunicación oficial desde Brasilia, los mercados han respondido muy favorablemente.

FUENTE: Valor Carne.