Hace cuatro años, la por entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner llevó adelante una medida que, en un contexto de puja con el sector agropecuario, fue muy controvertida: recuperar para el Estado el predio que la Sociedad Rural ocupa en Palermo hace 139 años, con el argumento de que la venta de mismo se hizo en tiempos de Carlos Menemo a un «precio vil».
La causa de la expropiación fue suspendida en 2013 por un recurso de amparo, que luego confirmó la Corte Suprema. Pero la discusión jurídica sigue su curso. Lo que se discute es el monto y la forma de pago: mientras que la suma abonada durante el menemismo asciende a u$s30 millones, un peritaje de la etapa de instrucción de una causa penal paralela sobre el mismo tema lo calculó en u$s131,8 millones.
«¿Se dieron cuenta de que están defendiendo un decreto de Cristina?», se quejó meses atrás, durante las conversaciones con funcionarios, uno de los abogados de La Rural, según indicó La Nación. «Es que pensamos que es correcto», recibió por respuesta.
Desde el Gobierno indican que seguirán con los pasos procesales y no cambiarán nada hasta que se defina la cuestión de fondo. En tanto, desde La Rural siguen afirmando que «la causa es tan absurda que nunca fue a juicio oral. El predio fue legítimamente comprado, tal como lo establecía el marco legal vigente. Si tienen dudas, que vayan a la Justicia, pero no pueden ser juez y parte por decreto». Y agregan: «Se convocó a los bancos Hipotecario y Ciudad de Buenos Aires y a un consorcio de inmobiliarias para determinar el valor del inmueble, no se hizo un uso irrestricto del bien, sino que se empleó sólo a los efectos del predio ferial, se invirtieron u$s70 millones y se cumple con el aporte del 5% al Estado de lo que se recauda en boleterías».
Y, ahora buscan los chupamacri los votos K, castigando al campo, la única fuente de divisas que tiene este país… Ojalá se acuerden en octubre.