La cosecha de peras y manzanas será un 50% menor que la del último año, adelantó el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, quien atribuyó la drástica merma al granizo que azotó las chacras de varias localidades y a los problemas de floración.

Weretilneck participó de la apertura de la Fiesta Nacional de Pera, en Allen, donde indicó que si a la baja que se registrará en la cosecha se le suma el arrastre de endeudamiento y de falta de rentabilidad que tiene el complejo frutícola, el panorama es aún más complicado pese a las medidas que tomó el gobierno nacional sobre el dólar, los reembolsos por puertos patagónicos y la eliminación de las retenciones.

En diálogo con el Diario de Río Negro, Weretilneck calculó que un 30% de la actual cosecha se perderá por el granizo, y otro 20% por problemas de floración y otros factores.

«Estamos esperando las medidas que va a tomar el gobierno nacional, fundamentalmente desde el punto de vista financiero. Uno puede pensar que las medidas nacionales le han dado al complejo frutícola algún tipo de precio que nos permita vender. Pero el problema que estamos teniendo hoy es de carácter financiero por el endeudamiento que trae el complejo«, manifestó.

Weretilneck dijo que al gobierno provincial le es imposible continuar subsidiando la actividad frutícola, y al respecto comentó que no puede «seguir haciendo los mismos aportes que en años anteriores», consignó el matutino.

FUENTE: DyN