“Finalmente este será un año para firmar el empate”, dijo a PERFIL Enrique Erize en un alto de la jornada que la CLERA organizó en Salta esta semana para avanzar sobre el futuro de las legumbres. Y es que el Director de la Consultora Nóvitas considera que a nivel internacional se han venido sucediendo una serie de hechos que alteraron las previsiones. En especial hechos de raíz internacional, como la guerra comercial entre China y los Estados Unidos, y la más reciente peste porcina africana. “La verdad es que este señor (Mauricio) Macri no tiene mucha suerte. El año pasado tuvo la sequía y este la baja del precio de los granos. Pero así están las cosas. Es un año complejo. En definitiva, un año para firmar el empate”, ratificó.
Al referirse a la caída de los precios internacionales de la soja y en cómo repercutirá en nuestro país, Erize consideró que es un número grande hablar de una pérdida de u$s3.000 millones. “Es más acertado pensar en un número menor, porque esa cifra está considerada en el caso de haber vendido toda la cosecha en el pico de precios y sabemos que no es así. Creo que el país perdería unos u$s2400 millones, lo que representa unos 600 millones de derechos de recaudación”, aceptó.
“El mercado internacional de granos está pasando un momento complejo. Esto arrancó hace 1 año cuando dijimos acá, en esta misma jornada organizada por la Clera en Salta en 2018, que China estaba definiendo el mercado granario como una cuestion geopolítica y eso se cumplió”, dijo. Luego, marcó el ingreso a escena del “factor Trump”, quien pateó el tablero y comenzó a gravar las importaciones chinas en Estados Unidos con aranceles dramáticos. “China contestó gravando la soja”, resumió.
Por otra parte, se fueron sumando conflictos que enrarecieron el clima general con Francia, el Brexit, Turquía, Venezuela y la crisis de Argentina. “Por su lado, los fondos de inversión huyeron de los commodities y eso deprimió aún más los precios de lo que debieran por los propios fundamentos de mercado”, dijo.
Como si todo fuera poco, hace 1 mes apareció la fiebre africana porcina en China que Erize tildó de dramática. “Por la cantidad de cabezas que tiene ese país, que son más de 440 millones, dicen que van a sacrificar 100 o 200 millones de cabezas. No hay cómo suplantar este faltante de China y eso genera una probable caída en su demanda porque el país asiático va a tener que modificar su dieta. Ante esta situación comienzan a tejerse todo tipo de conjeturas, algunas son ciertas y otras no tanto”, desdramatizó Erize.
Del lado de las cuestiones que pueden tener un sesgo positivo para el país en el mediano plazo, Erize explicó que hoy en EEUU se registra un avance muy lento de la siembra de soja y maíz y eso suele ir acompañado de una caída de los rindes potenciales. “Soy de los creen que en la guerra comercial por las patentes industriales y por la propiedad intelectual que reclaman los Estados Unidos, la víctima es la soja. Pero también creo que Trump necesita mejorar el precio de la soja porque los farmers lo tienen que volver a votar el año próximo; y del mismo modo los chinos necesitan arreglar el problema de la soja por su dieta se los exige”, analizó. Habrá que ver cómo maneja el gobierno local sus cartas comerciales y sus vínculos entre China y EE.UU.
LEGUMBRES. Paralelamente, y como cabía esperar en la Jornada anual de la Cámara de Legumbres de la República Argentina, Enrique Erize dio su visión sobre qué puede esperarse del cultivo de legumbres a nivel local y admitió que tienen un tremendo futuro en la Argentina. “Aunque no soy un especialista en el tema legumbres se que el país podría tener un escenario interesante para crecer porque la India es un mercado potencial para legumbres muy importante. Acá también considero que la Argentina debiera estar pensando no en si es negocio hacer legumbres, sino en tener políticas activas para el sector de la agroindustria, que es lo que no veo. Soy crítico del gobierno anterior y de este también en ese aspecto, porque dejar las cosas liberadas al libre mercado creo que no es la solución, y lo pienso luego de haber viajado mucho. Porque no hay país en el mundo que tenga mercados libres, desregulados, puros y cristalinos como pretenden vender”, argumentó el especialistas de mercados granarios.
“Argentina es competitiva para producir y vender ciertos productos y otros no. Lo importante es ver qué puede aprovechar nuestro país en este escenario mundial tan complejo, porque esta guerra comercial vino para quedarse, esto no se resuelve en 3 o 6 meses. Es mucho más serio de lo que uno cree porque en el fondo la cuestión está relacionada con la hegemonía en el mundo en el siglo XXI. En el XX nadie dudaba que la hegemonía era norteamericana, ahora parece que la cosa va a venir más peleada. Los países asiáticos representan unos 2000 millones de personas, con códigos distintos queriendo pelear el liderazgo mundial”, complementó. Habrá que estar más que preparados.
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