El año próximo celebrarán los 400 años de la protección de la Virgen del Valle.

Transitar la provincia Catamarca es una imperdible y maravillosas invitación por aspectos milenarios activos, culturas nativas y los reservorios arqueológicos más importantes del norte de la Argentina.

La emblemática Ruta Nacional 40 atraviesa esta singular y enigmática provincia argentina que no duden, tiene muchísimo para ver y descubrir entre paisajes inimaginables, culturas nativas, religiosidad a flor de piel y sabores de la tierra. Bendecidos bajo el manto de la Virgen del Valle, los catamarqueños celebrarán el próximo año sus 400 años de fe y protección bajo su manto celestial.

Visitar los lugares de oración, paz, respeto, unidad y silencio es una oportunidad que vale la pena apreciar en este destino de ambiente montañoso con microclimas que generan espacios propicios para agitar el cuerpo y descansar el espíritu. El circuito religioso “Santa María de los Ángeles” que tiene lugar en los Valles Calchaquíes propone recorrer sencillos templos que cobijan a María. Uno de ellos es Fuerte Quemado, una capilla construida en 1898 que conserva en su interior la Piedra Ara, imágenes traídas del Alto Perú, Por su  parte, Las Mojarras es una capilla dedicada a San Antonio de Padua con un sencillo altar con dos ángeles custodios de Nuestra Señora del Rosario, el Templo Nuestra Señora de la Candelaria, Lampacito, capilla dedicada al santo Domingo Guzmán construida en 1886 entre otras de singular belleza. Y cada 21 de junio la tradición andina da inicio al nuevo año agrícola con la celebración del Inti Raymi.

Catamarca es también destino de manos hilanderas y tejedoras en el Departamento de Belén junto a la Ruta del Telar. Aquí mujeres artesanas proyectan con su diario trajín un arco iris en los trazos de las prendas artesanales y junto a ellas es posible compartir experiencias matizadas por costumbres ancestrales y adquirir bellísimos ponchos reconocidos en el mundo.

“Llegué buscando la réplica del poncho de Juan Manuel de Rosas. En Belén conocí a la familia Avar Saracho, Antonio y su mujer, ella teje con técnicas ancestrales y por primera vez confeccionó para mí, la réplica del poncho del Cacique Mariano Rosas. Una maravillosa experiencia donde es hermoso llegar y muy difícil partir” comentó Miguel Ángel Montero a PERFIL.

La localidad de Villa Vil, “Portal de la Punta catamarqueña” se encuentra a 365 km de San Fernando del Valle de Catamarca y cautiva con la calidez de su gente y sus encantadores paisajes. Al costado de la Ruta Provincial 43 se ubican Seis Cascadas de singular belleza principalmente en verano propician un escenario poco común salpicando frescura entre las piedras, los Castillos, impactantes montañas multicolores con vistosos volcancitos en permanente actividad, Laguna Blanca, sitio de gran valor arqueológico e histórico es otra maravilla catamarqueña y actualmente Reserva de Biósfera y Reserva Provincial de Vida Silvestre protege poblaciones de vicuñas, flamencos, suris y la biodiversidad de la Puna. Aquí los turistas participan del “chakú”, captura, esquila y posterior liberación de vicuñas salvajes con técnicas de pueblos precolombinos.

Morteritos-Las Cuevas y el rescate de la identidad junto a la Fiesta del Cóndor, San José, localidad del Departamento Santa María es otra opción con legado cultural prehispánico, con importante actividad agrícola y la invitación a la celebración religiosa San Roquito el 16 de agosto, un encuentro de fieles artesanos, vendedores ambulantes, copleros, bailarines, “rezadoras” y “curanderos” de la puna catamarqueña y salteña quienes comparten junto a visitantes y turistas costumbres ancestrales y mucha alegría.

Visitar Catamarca permite acceder al legado cultural de raigambre
histórica, profunda fe católica y aspectos milenarios, activos en el presente que prometen futuro.

CATAMARCA EN BUENOS AIRES. La Casa de Catamarca en Buenos Aires, ubicad en la Avenida Córdoba 2080 es la embajada de la provincia, ejerciendo la representación del gobierno provincial ante organismos nacionales y provinciales, públicos y privados, fortaleciendo los vínculos entre las partes y promoviendo acciones, programas y reuniones de distinta índole.

También se encuentra a disposición de los catamarqueños residentes o de paso por la Gran Ciudad, con una importante acción social, difusión la cultura catamarqueña y promoción de propuestas turísticas y una biblioteca donde acceder a obras de escritores catamarqueños. La Cooperativa Huayra Huasi se encuentra dentro de la Casa de Catamarca con la venta productos catamarqueños: dulces, vinos, nueces, aceites, arropes y prendas textiles junto a los tradicionales ponchos de Belén, ruanas, guantes, bufandas y tapices.

“Entrá a nuestras redes sociales, entérate de nuestras actividades y obtené más información sobre lo que somos y hacemos los CATAS en Buenos Aires” es el mensaje desde la Casa de Catamarca, que está abierta para el público de lunes a viernes de 9 a 17 horas». Los interesados en obtener más información pueden aceder a www.cataweb.com.ar

Facebook: casacatamarca.
Twitter @casacatamarca.

Por Bettina Cucagna para Super CAMPO.