Eduardo Sancho, presidente de FECOVITA (Federación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas) destacó la importancia del movimiento cooperativo, “como modelo de economía social, que tiene una oportunidad clave -como opción eficiente, competitiva y sustentable- para que los pequeños y medianos productores lleguen al mundo, frente al proceso de concentración económica que se refleja a nivel de las grandes empresas”.

Una de las conclusiones a las que se arribó durante el encuentro fue remarcar la necesidad de consolidar el compromiso y la integración de los jóvenes en el trabajo cooperativo, para darle fuerza y continuidad al modelo. Precisamente en el Foro se expusieron diversas propuestas aportadas por los jóvenes en especial en los espacios de desarrollo y capacitación.

Actualmente el 60 % de la producción de la vitivinicultura mundial está en manos de cooperativas y solo el 10 % va a comercialización directa, mientras que el resto se hace a través de intermediarios, por lo que se considera que existe un gran potencial en el cooperativismo para fortalecer el desarrollo de la cadena de valor, con el objeto de otorgar un mayor margen a los productores.

La próxima edición del Foro Mundial Cooperativo Vitivinícola se realizará en Francia y su líder será Joel Castany, presidente de la Cooperativa Val D´Orbieu y del grupo Vinadeis.

FECOVITA es actualmente la cooperativa vitivinícola más grande de América. Nuclea a 29 cooperativas, 54 bodegas y 5.000 productores con 25.000 hectáreas de viñedos.