Ayer por la mañana, el flamante presidente Mauricio Macri anunció, en una conferencia de prensa brindada en Pergamino, la quita de las retenciones de todas las economías regionales y los cereales, mientras que confirmó que las que se aplican a la soja, actualmente de un 30%, se reducirán un 5% anual hasta su eliminación total.
El cumplimiento de una de las promesas de campaña más apoyadas por el sector agropecuario repercutió positivamente entre los actores del sector, que se expresaron su apoyo.
A nivel gubernamental, fueron varios los funcionarios que se pronunciaron al respecto. El ministro de la Producción de Santa Fe, Luis Contigiani, consideró que el anuncio «debe ser acompañado con otras medidas complementarias, porque de lo contrario el costo lo va a pagar el consumidor».
«Tendríamos que tener un conjunto de otras medidas para evitar desequilibrios», aconsejó el funcionario provincial, al tiempo que agregó: «Si eliminamos retención y no ponemos encajes en la Argentina mediante estudios de competitividad de todas las cadenas agroalimentarias que nos permitan distribuir ganancias de un eslabón hacia otro, vamos a tener serios desequilibrios y no vamos a poder controlar los efectos negativos sobre lo que se denomina los precios internos o precios de consumo», informó la agencia de noticias DyN.
El apoyo de la Mesa de Enlace
El vicepresidente de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), Carlos Ianizzotto, calificó de «auspiciosa» la medida anunciada por el presidente Mauricio Macri. Sin embargo, advirtió que «no es un tema que soluciona los problemas de las economías regionales ni de la vitivinicultura, sino que tiene que estar vinculado también a otros temas que están relacionados a los derechos de exportación, al flete, a los costos salariales e impositivos».
De todas maneras, Ianizzotto destacó que «ha caído muy bien» la noticia, porque «se va acercando al modelo productivo en donde se tiene en cuenta el esfuerzo del productor».
Por su parte, el titular de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luis Etchevehere, afirmó que la eliminación de dichos gravámenes «se va a compensar con una mayor producción» pecuaria y también de granos tales como el trigo, maíz, sorgo y girasol.
«De esto se trata, ya que este año (por mantener los derechos de exportación sobre estas producciones) quedaron dos millones de hectáreas sin sembrar, y la retenciones sobre cero (recaudado) es cero», explicó Etchevehere, en declaraciones a medios de comunicación en Pergamino.
En tanto, CRA sostuvo que «es un día muy importante para todo el sector productivo de la Argentina y un principio de vuelta de página en la historia reciente». «La eliminación de las retenciones es un paso hacia delante para la recuperación de la competitividad y rentabilidad en todas las producciones, incluidas las desfinanciadas economías regionales, donde está en riesgo el empleo de 1,5 millones de personas», añadió la entidad.
Asimismo, Omar Príncipe, presidente de la FAA, comentó: «La quita de retenciones es una buena noticia: hay que devolver rentabilidad y competitividad a los productores pero de ahí y más allá de la alegría, hay que empezar a desmenuzar las cosas».
En declaraciones a radio América, Príncipe consideró que «la quita de retenciones en las economías regionales no es la solución a todos los problemas: primero hay que asegurarse que esa quita le llegue realmente al productor, es decir, a los quinteros de Mendoza, Neuquén o Río Negro, y no quede en un intermediario».
Para el titular de la FAA, «hay que trabajar mucho en las cadenas de valor en las economías regionales porque los pequeños productores son rehenes de esas cadenas».
Toda la cadena de valor aplaudió la medida
El presidente de la Cámara de Exportadores (CERA), Enrique Mantilla, destacó el «giro estratégico» que a su juicio representa la decisión del presidente Mauricio Macri de eliminar las retenciones a la industria y parte del agro, así como la supresión de las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI). En un comunicado, Mantilla sostuvo que Macri inició un «giro estratégico en materia de exportaciones basado en un constructivismo pragmático».
En tanto, el director de la consultora ABECEB, Dante Sica, consideró que los anuncios de eliminación de las retenciones al agro y de las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI) dan la pauta de «una economía encaminada a tener reglas normales».
El ex secretario de Industria sostuvo que esas reglas «permitirán estimular la producción agropecuaria, disminuir la actual asfixia tributaria y transparentar y cumplir las normas que rigen el comercio internacional».
Por su parte, la Bolsa de Cereales destacó que el aporte del campo al crecimiento «requería como medida indispensable la remoción de este impuesto, el cual es uno de los más distorsivos de nuestro sistema tributario».
Asimismo, el presidente de la Cámara Industrial Olivícola de La Rioja, José Hilal, consideró que la medida dispuesta por el presidente Mauricio Macri es una noticia «positiva» y «alentadora» para el sector.
«Es una cuestión que venimos reclamando hace años. El tema es que la retención que tiene la aceituna es 5%. En el caso de algunas empresas que están ordenadas fiscalmente lo retenido se lo devolvían al tiempo, a veces cuando era más eficiente pasaban pocos meses y en los últimos tiempos era muy difícil que te devuelvan el 5%» explicó Hilal, al tiempo que agregó: «En el caso de la aceituna es una noticia positiva, es una medida alentadora y es una señal de entender los problemas y de tratar de ayudar a las economías regionales».
Aunque lo consideró un «excelente paso», también lo calificó de «pequeño», porque «no es un todo todavía pero es parte de lo que se necesita» para superar una crisis inédita en la historia del rubro.
Los productores olivareros aguardan iniciar un diálogo con el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile. «Pero por el momento no hemos tenido contacto. Esperamos tenerlo pronto», dijo Hilal.
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