En la actualidad despiertan gran interés las disertaciones sobre la dificultad técnica que presentan las malezas para ser controladas con principios activos usuales. Aunque no sólo éstas presentan resistencia, sino también las plagas y las enfermedades.

La aparición de resistencias no ocurre por generación espontánea, sino que es muy probable que los primeros síntomas se hayan presentado en años anteriores en forma leve, donde quizás el umbral de daño económico no justificaba realizar tratamientos químicos. Pero, cuando hay que pagar esa cuenta el monto tiene una proyección geométrica, lo que bien se sabe para el caso de malezas y resistencias de plagas a eventos genéticos.

Por lo tanto, debe ser muy tenido en cuenta en cultivos como el trigo o la cebada, que con mercados normales, presentan márgenes no destacados pero estables, que no resisten la utilización de fungicidas de alto costo.

Un trabajo llevado a cabo por el Departamento de Investigación y Desarrollo de Arysta LifeScience en las principales áreas de producción de trigo y cebada mostró que agregar un Clorotalonil 72% SC al ya reconocido fungicida Evito T a razón de 1,1  L/ha para el caso del trigo; y de 1,25 L/ha en cebada, redujo significativamente la incidencia de enfermedades como Mancha Amarilla, Roya del Tallo y Roya de la Hoja para el caso del trigo y de Mancha Borrosa y Mancha en Red en cebada. Esto se logró tanto a los 15 como a los 30 días de realizada la aplicación, con importantes aumentos de rendimiento, que variaron entre el 27% vs. un testigo absoluto y 16% vs. el estándar de Evito T, solo en cebada hasta el 23% vs. un testigo absoluto y 12% vs. el estándar de Evito T, sólo en el caso del trigo en las localidades donde las enfermedades tuvieron mayor severidad. Los cuadros adjuntos ponen de manifiesto los valores obtenidos para el área núcleo de trigo y cebada, y para las principales enfermedades de cada cultivo.