Para la presente campaña 2015/16 la situación se traduce en expectativas de reducción de la superficie a sembrar, caída de hasta 20% (en quintales) de los precios pactados por el alquiler de campos para fines agrícolas, predominio del arrendamiento por aparcería (porcentaje) en casi todo el país salvo la zona núcleo, e incluso cambios en las modalidades de pago de los alquileres, que ahora se acuerdan fraccionar hasta en varias cuotas.

En este escenario, la buena noticia es que hubo un incremento de arrendamiento de campos destinados a ganadería, con precios que se mantuvieron constantes respecto de la campaña pasada. La llegada de un nuevo gobierno alimenta las expectativas de un giro en la política gubernamental hacia el sector, dato relevante para una actividad que requiere no menos de tres años de inversión antes de obtener resultados.

Además, se abrió nuevamente el mercado estadounidense para la exportación de carnes y se avizora un fortalecimiento de la demanda de cortes vacunos por parte de los países europeos, con lo que allí se presentan nuevas oportunidades de negocios. Habrá que ver si después de ocho años la Argentina puede cumplir otra vez con la llamada Cuota Hilton, la exportación de cortes Premium, apetecidos por Europa.

Precios a la baja

«En un año bajó muy fuerte el valor de los granos, hay una inflación importante y tenemos un dólar atrasado. Así, los márgenes se han reducido al mínimo. Lo único que es rentable es la soja en las mejores zonas, el resto de los granos se producen a pérdida», afirma Juan José Madero, director de la División Campos de L.J. Ramos. Esta situación ha derivado en una caída de los precios de los arrendamientos e incluso cambios en las modalidades de pago de los alquileres.

«Hoy la gran mayoría de los campos del país se alquila a porcentaje (contratos de aparcería)», destaca el experto, una modalidad en la que el propietario pone el campo y cobra un 30-35% (en general en granos) y el productor o contratista trabaja el lote. Si el propietario aporta los insumos o la maquinaria, su ingreso pueden llegar hasta 40-45%. En general se optó por un porcentaje con escalas variables por encima del rinde promedio.

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