Funcionarios de los servicios nacionales de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y de Sanidad Agraria de Perú mantuvieron un encuentro en Buenos Aires en el que se firmó un documento que establece la aceptación de los requisitos fitosanitarios para la inmediata apertura comercial de arveja, garbanzo y sésamo de origen argentino al mercado peruano.

La reunión estuvo encabezada por el director nacional de Protección Vegetal del Senasa, Diego Quiroga, acompañado por el director nacional de Relaciones Agroalimentarias Internacionales, Omar Odarda, y por el director general de Sanidad Vegetal del Senasa de Perú, Moisés Pacheco Enciso. Ambas delegaciones estuvieron integradas por funcionarios y técnicos, representantes del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de Argentina y de la Embajada de Perú en nuestro país.

La secretaria de Mercados Agroindustriales, Marisa Bircher, felicitó el trabajo técnico realizado por el Senasa y señaló: «Seguimos avanzando en retomar las negociaciones sanitarias en aquellos mercados en los que tenemos un interés particular, de tal manera de diversificar nuestra oferta exportadora y ofrecer a nuestros sectores productivos nuevas oportunidades de negocios».

El mercado peruano es muy atractivo para los productores de legumbres, como es el caso de las arvejas y garbanzos. En 2015, Perú importó arvejas por u$s19 millones, garbanzos por u$s4,35 millones y sésamo por u$s2 millones, mientras que nuestro país exportó al mundo en el mismo período por u$s26,1 millones, u$s38,1 millones y u$s13,74 millones, respectivamente.

Durante el primer semestre de 2016, la Argentina exportó al mercado peruano por un valor de u$s210 millones en productos agroindustriales, que corresponde al 60% del total enviado. Se verificó un aumento de 11% en dichas exportaciones con respecto a igual período de 2015.

Por otra parte, se acordó un plan de trabajo que establece los lineamientos para la exportación de palta, variedad Hass, desde Perú hacia la Argentina, que asegura los procedimientos en la producción, cosecha, transporte, empacado, envasado y etiquetado, limitando asimismo los puntos de ingreso.

Los procedimientos mencionados deberán ser certificados por el servicio sanitario de Perú y las plantas empacadoras deben ser registradas previo a la temporada de exportación. La producción argentina de palta no alcanza para satisfacer el creciente consumo nacional, ya que apenas cubre el 50% de la demanda local, siendo el principal abastecedor Chile.

Como conclusión, se acordó el envío de los respectivos listados de productos de interés que cada parte priorizará para los próximos trabajos de apertura comercial bilateral, focalizando en aquellos que no son sensibles para cada país.

FUENTE: Senasa.