Por primeva vez, y ante la falta de una ley actualizada en Buenas Prácticas Agrícolas, la provincia de Buenos Aires decidió dar un paso adelante al dictar la normativa fitosanitaria 246/MAGP- 2018 que permitirá ordenar el tema de las aplicaciones en el territorio. Al respecto, Leonardo Sarquís, Ministro de Agroindustria, comentaba a PERFIL: “La idea es empoderar a los municipios y ayudarlos para ordenar y controlar de una manera distinta todo lo que sean las aplicaciones de fitosanitarios”.
Ahora, ya son más de 40 municipios que adhirieron a la propuesta y comenzarán trabajar con las nuevas disposiciones y protocolos de Buenas Prácticas Agrícolas para proceder siguiendo pautas claras. La resolución entró en vigencia el 1ª de enero de 2019. Super CAMPO consultó a Luis Herrera, Director Provincial de Fiscalización Agropecuaria, Alimentaria y de los Recursos Naturales,
para conocer el objetivo de los artículos de la resolución provincial.
CON LEY. Buenos Aires cuenta con una Ley de Agroquímicos (existente en la actualidad) que data de hace 30 años, complementada por su reglamentación y algunas resoluciones ministeriales. La normativa se halla en proceso de revisión en la legislatura provincial desde hace varios años. Asimismo, sobre el final de la gestión del gobierno anterior se arribó a un texto reglamentario actualizado que tampoco llegó a ver la luz e implementarse.
“En estos últimos años, hubo varios proyectos en danza que no han logrado el consenso necesario para transformarse en Ley, y/o han perdido estado parlamentario. Ante esta situación general en la provincia, surge la necesidad imperiosa e inclusive solicitada por los municipios de establecer algunas reglas de juego generales emanadas desde la provincia”, comentó Luis Herrera sobre la situación y aclara que cada artículo de la resolución para ordenar la aplicación de fitosanitarios “vienen a fortalecer y enmarcar en parámetros de mayor seguridad las aplicaciones realizadas en determinadas áreas, tipificadas como zonas de amortiguamiento (lotes o potreros contiguos al área urbana, zona residencial extraurbana, área de población dispersa, márgenes de cursos o cuerpos de agua, zonas de bombeo, establecimientos educativos, áreas de esparcimiento y reservas naturales) donde se deberá considerar las características intrínsecas del producto a utilizar, la regulación necesaria del equipo y las condiciones meteorológicas antes y durante la aplicación, incluyendo la presencia del profesional”.
Esta resolución “ha sido dictada ajustándose a las facultades legítimas emanadas de la legislación disponible y establece nuevas reglas, sumadas a las vigentes que deberán cumplirse cada vez que se apliquen fitosanitarios en esas áreas sensibles o interfaces que permiten mejorar la gestión de las aplicaciones”, aclara Herrera.
VIGENCIA. En el orden nacional, y por iniciativa de los entonces ministerios de Agroindustria y de Ambiente y Desarrollo Sustentable, el año pasado se generó un grupo de trabajo interministerial que consensuó un documento final en el que participaron, además, los ex ministerios de Ciencia y Tecnología y de Salud de la Nación en el que se proporcionan unos Principios y Directrices que deben regir las Políticas Públicas en materia de Aplicación de fitosanitarios.
Hasta llegar a su aprobación, esta nueva resolución se debatió y analizó con un equipo de profesionales del Ministerio, se examinó con referentes reconocidos y se sometió al dictamen de la Asesoría General de Gobierno. Participaron Carbap, CEDASABA, Sociedad Rural Argentina, FAA, INTA, Cámaras Agroaéreas, y de la Universidad Católica de Buenos Aires.
BPA. Con el ánimo de fomentar el cumplimiento de la resolución y asegurar su implementación, se propició la firma de convenios con municipios para favorecer las acciones de control aprovechando la sinergia de la actuación coordinada entre los órganos municipales y los provinciales. Dentro de los artículos de esta resolución, se promueve la correcta implementación de las Buenas Prácticas Agropecuarias (BPA) a través de convenios.
“En el lanzamiento, más de 40 municipios firmaron el convenio para implementar esta normativa superadora, auditando in situ las aplicaciones, fortaleciendo su control. Así, los municipios pueden generar un sistema de aviso previo. Por ejemplo, 48 horas antes de una aplicación los productores deberán dar aviso por la vía que se determine indicando su intención de aplicación, detallar cuál es la receta agronómica obligatoria que avala la aplicación, la empresa de aplicación, que debe hallarse habilitada, el operario que realizará el trabajo debe contar con el carnet habilitante y el ingeniero agrónomo que esté presente en el lote, entre otras medidas”, indicó Herrera respecto al uso correcto de BPA para cada municipio.
El Municipio puede auditar las aplicaciones. “Es la primera. vez que se dicta una norma de estas características en la jurisdicción bonaerense. Hasta ahora no se hacía distinción en cuanto a las reglas de juego a cumplir cada vez que se aplican fitosanitarios en los campos dedicados a la actividad agraria”, reveló el director provincial encargado de proteger los recursos naturales bonaerenses.
Los Ingenieros Agrónomos como profesionales idóneos serán fundamentales para ayudar al cumplimiento de esta resolución, ya que pueden prever y analizar todas las variables en juego y decidir para cada caso en particular las medidas a adoptar, pudiendo restringir o suspender las aplicaciones sí las condiciones no fuesen las adecuadas, sea al inicio o durante las mismas.
AGRICULTURA SUSTENTABLE. CASAFE considera que la resolución provincial para ordenar la aplicación de fitosanitarios en Buenos Aires, significa un gran avance en el uso responsable de agroquímicos y promueve la armonía entre los vecinos del área periurbana y los productores agropecuarios. Es una normativa que requiere de la interacción con los municipios y, con su correcta instrumentación, asegurará aplicaciones eficientes y seguras, que no perjudiquen a las personas ni al ambiente. «Dentro de las pautas establecidas en la norma, consideramos importante la presencia de un profesional de las ciencias agropecuarias, que determine las previsiones a tener en cuenta antes, durante y después de la aplicación y que, además, esté facultado para suspenderla», indicó el Director Ejecutivo de la entidad, Federico Landgraf. «La resolución también prohíbe las aplicaciones en horario escolar que, junto a otras medidas consideramos fundamentales para el uso responsable de fitosanitarios», agregó.
Respecto de las aplicaciones periurbanas, junto a la Secretaría de Gobierno de Agroindustria, Casafe ha desarrollado más de 30 demostraciones a campo de aplicaciones de fitosanitarios a fin de comprobar hasta dónde llega la deriva si se utilizan los agroquímicos de forma responsable. Después de 34 demostraciones en distintas localidades del país, la deriva promedio llegó a 3 metros de distancia en el caso de la pulverización terrestre y 32 metros en la aérea. Durante el 2018 alcanzamos a más de 32.224 personas en 448 capacitaciones a lo largo del país.
MUNICIPIOS. Firmaron el convenio los intendentes de Ayacucho, Emilio Cordonnier; de Azul, Hernán Bertellys; de Balcarce, Esteban Andrés Reino; de Berisso, Jorge Nedela; de Carlos Tejedor, Raúl Salas; de Chascomús, Javier Gastón; de Chivilcoy, Guillermo Britos; de Florentino Ameghino, Calixto Tellechea; de General Alvear, Ramón José Capra; de General Arenales, Érica Revilla; de General Belgrano, Osvaldo Dinápoli; de General Paz, Juan Manuel Álvarez; de Lezama, Arnaldo Harispe; de Lobería, Juan José Fioramonti;
de Lobos, Jorge Etcheverry; de Magdalena, Gonzalo Peluso; de Mar Chiquita, Carlos Alberto Ronda; de Puán, Facundo David Castelli; de Ramallo, Mauro Poletti; de Rauch, Roberto Maximiliano Suescún; de Saladillo, José Luis Salomón; de Suipacha, Alejandro Federico; de Trenque Lauquen, Miguel Fernandez; de 25 de Mayo, Hernán Ralinqueo. Se sumaron, además, representantes de los municipios de Carlos Casares, Chacabuco, Coronel Suárez, General Madariaga, General Pueyrredón, La Plata, Las Flores, Lincoln, Necochea, Pergamino, Ramallo, Tandil, Baradero y Colón.
Por Ángeles Ruiz para Super CAMPO.
Twitter
Facebook
G Plus