Suba y preocupación. El último aumento de combustibles representa un desembolso de $1.500 millones para el productor.

El último aumento aplicado a los combustibles que se concretó en la primera semana de abril y concluyó con aumentos promedio del 3%, aplicados por YPF, significará para la actividad productiva un desembolso de 1500 millones de pesos. Así lo aseguró un informe elaborado por el área económica de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA)

“Cuatro, fueron los aumentos desde la anunciada desregulación de los combustibles en octubre de 2017; una medida celebrada en pos de la transparencia del mercado, pero que al igual que muchas otras que resultan razonables, terminan golpeando de lleno el bolsillo de los productores”, aseguró el comunicado de CRA.

Una suba del orden del 3 por ciento en el gasoil, suma 1500 millones de pesos adicionales a los gastos del sector agropecuario y agroindustrial. “Hay que tener en cuenta que el efecto acumulativo ya es más que importante, con índices de incrementos del 40% desde un año a esta parte, superando y por mucho los valores de la inflación”, se consignó desde CRA.

De acuerdo al Departamento Económico de CRA, hoy la Argentina está cuarta en un ranking de los 35 países de la región en cuanto a precios de combustibles se refiere. En un mercado desregulado son múltiples los factores que se relacionan para formar el precio del combustible, enumeremos algunos de para entender un poco más de su comportamiento:
– Precio Internacional del Barril de Crudo (variación del 5%)
– Cotización del Dólar en el Mercado Doméstico (variación 6%)
– Precio del Bioetanol

Otro factor que influye en el alza de los precios es el componente impositivo, que está a la cabeza que del total pagado en una factura de gasoil, representa el 64 por ciento que incluye a conceptos no grabados, IVA, ingresos brutos. De los 1500 millones de pesos, el impacto impositivo suma 960 millones pesos.

Dentro de estos el Impuesto de Transferencia del Combustible (ITC) representaba un 26 por ciento, la implementación de la rebaja de 10 por ciento, que entró en la reciente reforma impositiva, actuará como un colchón frente a los aumentos que pueda sufrir el barril de crudo, según dicen desde el Ministerio de Agroindustria. “Como productores esperamos ver los frutos de esta política de desregulación, y que se manifieste en una baja de costos a futuro, lo cual entendemos fue el espíritu de esta medida”, consignó el trabajo.

Fuente:  Confederaciones Rurales Argentinas (CRA)