Tractor Magnum Case IH. El impacto en el sector de la maquinaria agrícola, ya sea por la adquisición de tractores, cosechadoras o pulverizadoras, se realizará en las zonas favorecidas y no se compensará con las zonas afectadas por la sequía.

Comenzamos el 2018 con un impacto climático que ha afectado a la Argentina prácticamente en todo el país, aunque en dimensiones distintas. En algunas regiones ha llovido por franjas y en el inicio de la cosecha se están obteniendo rendimientos muy dispares en una misma zona. Para muchos productores la inundación del año pasado generó un beneficio en la campaña actual ya que la retención de agua en el perfil de suelo hizo que los cultivos pudieran aprovechar ese excedente hídrico y por esa razón se están obteniendo rendimientos hasta 50 quintales de soja por hectárea en algunas localidades. Sin embargo, esto no es una foto que refleje lo que sucede en todo el país, dado que hay regiones como la provincia de Entre Ríos, que han sido muy afectadas por el clima de manera muy negativa. Si analizamos el contexto general de producción de grano en la Argentina, para esta campaña se estarán produciendo entre 107 y 110 millones de toneladas, que sigue siendo un volumen muy bueno frente al promedio de los últimos años, pero lógicamente es una merma considerable frente a los 128 millones de toneladas cosechadas en la campaña anterior. Esto tiene un impacto en el sector de la maquinaria agrícola, ya que la adquisición de tractores, cosechadoras o pulverizadoras, se realizará principalmente en las zonas favorecidas y no se compensará con las zonas afectadas. Aun así, proyectamos que será un buen año para el mercado de maquinaria agrícola, seguramente inferior al 2017 que fue récord de ventas en la última década. La financiación viene jugando un papel importante para avanzar en la compra de maquinaria agrícola. Por eso Case IH ha lanzado distintas alternativas de financiación de manera directa a través de CNH Capital y también tenemos convenios con entidades bancarias oficiales y privadas para ofrecer un amplio abanico de crédito a quien lo necesite. El país se está empezando a ordenar. Está claro que lo ideal sería tener un tipo de cambio mucho más estable y que las tasas de financiación fluctúen de la manera que lo hicieron a finales del 2017, pero empezamos a ver a nivel macro tendencias más razonables. Las variaciones de alguna manera lo hacen pensar un poco más al productor, pero no debemos olvidarnos de que la producción agropecuaria está dolarizada (semilla, fertilizante, maquinaria agrícola) y que la comercialización de granos también. El incremento de precio de los commodities en los últimos meses también ayudará a compensar en algunos casos la baja de producción. En cuanto a las innovaciones en maquinaria agrícola, el año pasado vimos el lanzamiento de nuestro tractor autónomo y nos ha hecho repensar muchas cosas. La producción agropecuaria en la Argentina está cambiando el formato, midiendo una gran cantidad parámetros e indicadores para hacer un trabajo mucho más eficiente. Hoy se está debatiendo en el ámbito de la industria si la tecnología debe seguir avanzando sobre sistemas hidráulicos o eléctricos. Las empresas se encuentran trabajando para evaluar la mejor alternativa y que tenga el costo más económico, porque se debe producir una tecnología que sea accesible para el agricultor. Por Christian Lancestremere, Director Comercial de Case IH Argentina para Super CAMPO.