La Cámara de Biocombustible de la Argentina (Carbio) informó ayer que la producción local de biodiesel alcanzará un récord de 2,7 millones de toneladas en el 2016, con un incremento del 50% respecto al año anterior.

Según Luis Zubizarreta, titular de Carbio, el incremento en la producción se sustentó en la promoción del consumo de biodiesel dispuesto por el transporte de pasajeros, la generación eléctrica y la decisión oficial de avanzar con los protocolos de certificaciones de sustentabilidad.

«Se abren buenas perspectivas para 2017 cuando esperamos afianzar estos resultados con ajustes necesarios, como la anulación de los derechos móviles a la exportación de biodiesel, para estar a la altura de los desafíos que propone el mercado mundial», expresó Zubizarreta.

En tanto, el mercado interno de biodiesel, según Carbio, «se ha consolidado» a partir de la decisión oficial de establecer un corte obligatorio en los combustibles que asciende a 10%, mientras que en el caso de Brasil este nivel es de 7 por ciento.

Si bien la producción de biodiesel comenzó a pisar fuerte en el país hace una década por la exportación, la prohibición dispuesta en el 2012 por la Unión Europea dejó sin mercado al 90% de las producción destinada a las ventas externas.

La búsqueda de nuevos espacios abrió las puertas de los Estados Unidos, que tienen una alta exigencia, quien se convirtió en el principal receptor del biodiesel local durante 2016.

Durante el presente año, la Organización Mundial de Comercio (OMC) hizo lugar al perdido argentino para que Europa reviera su posición, motivo por el cual los despachos al Viejo Continente deberían reabrirse en los próximos meses.

Por otra parte, desde Carbio destacaron como negativa la decisión de Perú de disponer medidas antidumping al biodiesel procedente de la Argentina, al adoptar medidas similares a las dispuestas por Europa. Ese país adquirió entre el 2012 y 2015 un volumen de 195 mil toneladas, por un valor de u$s147 millones.

FUENTE: DyN