A menudo, se suele relacionar la mayor o menor presión de enfermedades de fin de ciclo (EFC) o Mancha Ojo de Rana (MOR) a las condiciones ambientales predisponentes. Sin embargo, ciertos cambios en el manejo del cultivo de soja, como el uso de herbicidas pos-emergentes para el control de malezas de hoja ancha -que necesariamente generan un cierto nivel de fitotoxicidad en la planta-, también generan condiciones predisponentes a un aumento de presión de esos patógenos.

Así, los paradigmas de tratamiento típicos de enfermedades en soja, que recomendaban aplicaciones por estado fenológico, empiezan a quedar obsoletos y se vuelven potencialmente peligrosos para la posible productividad del lote. Si una soja presenta problemas serios de enfermedades en estado vegetativo y no es morigerado mediante ningún control, estamos dejando en el lote una altísima presión de patógeno para el momento en que el cultivo defina su rendimiento, pero con una gran diferencia. La eficiencia del tratamiento en un cultivo de gran desarrollo es infinitamente más baja que cuando el cultivo se encuentra en pleno desarrollo.

Debido a lo antes expuesto, se aconseja combinar cambios culturales en el control de enfermedades, altas eficiencias de acción en los productos a utilizar y costos eficientes al momento que se vive. Del primero de los ítems debe ocuparse el productor y/o el asesor. De los segundos se ocupan las empresas como Rotam®. En este sentido, a su ya conocido fungicida Ykatu® suma esta campaña Guayra®. Este producto es uno de los pocos del mercado que trabajan con tres modos de acción fuertemente diferenciados entre sí.

Está formulado en base a Azoxistrobina 7.5% mas Tebuconazole 16% y Carbendazim 36%. El primero de los principios activos trabaja sobre la respiración mitocondrial, el segundo sobre la síntesis del ergosterol y el tercero sobre la división celular. La combinación asegura que el patógeno es atacado por tres vías diferentes, muy diferenciadas entre sí, reduciendo al mínimo la posibilidad de aparición de resistencias.

Este pack de tecnología en el tratamiento de enfermedades puede ser utilizado en forma eficiente, utilizando a Ykatu® (Azoxistrobina + Tebuconazole) como un primer tratamiento de control destinado a situaciones de baja presión o controles tempranos. Hacia los estadíos mas definitorios del rendimiento, Guayra® se impone como la forma más contundente y eficiente en el control de enfermedades de Fin de Ciclo, MOR o inclusive Roya Asiática de la Soja (RAS), que el año pasado tuvo una fuerte presencia en toda el área sojera nacional.

Tanto Ykatu® como Guayra® pueden ser utilizados en mezclas con otros fitoprotectores como insecticidas. Dentro de estos el pack de Rotam® formado por Lucro®, Astris Pack® y Kospi® garantiza una excelente sinergia en el control combinado de plagas  y enfermedades.