Las restricciones, afectaban seriamente el desenvolvimiento de las distintas actividades de la industria de alimentos y bebidas y principalmente a las economías regionales de la Patagonia.
“Para COPAL es una medida que permitirá recuperar la competitividad y normalizar los despachos de la producción de sectores como el frutícola y el pesquero, entre los principales afectados desde 2013”, dijo el presidente de COPAL, Daniel Funes de Rioja, y agregó, “la búsqueda de mercados externos, junto a la preservación de los ya existentes es un objetivo constante de los sectores que integran nuestra industria, como una manera de estimular el crecimiento económico del país y el ingreso de divisas”.
En este escenario, la industria de alimentos y bebidas, está convencida que estos esfuerzos en lo inmediato tendrán un impacto positivo en la performance de las economías regionales y contribuyen a la recuperación del diálogo y entendimiento entre ambos países hermanos y asociados en el bloque del MERCOSUR.
COPAL es una entidad federal que reúne a 36 cámaras de la industria de alimentos y bebidas de la República Argentina.
Este sector representa el 25% del PBI industrial y el 28% de los puestos de trabajo manufactureros, que representan más de 500.000 personas.
Las exportaciones argentinas de la industria de alimentos y bebidas equivalen al 34% de las ventas al exterior del país y están representadas todas las economías regionales
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