El tratamiento del proyecto de Ley de Agricultura Familiar en la Cámara alta tuvo lugar el pasado miércoles. Ya con media sanción en Diputados en noviembre, la normativa apunta a una reparación histórica, la promoción y el fortalecimiento de esta actividad llevada adelante por pequeños productores y que representa el 20% del PBI del sector agropecuario nacional.

Senadores apoyaron la medida por unanimidad. En el Año Internacional de la Agricultura Familiar, la ley declarara «de interés público la agricultura familiar, campesina e indígena por su contribución a la seguridad y soberanía alimentaria del pueblo».

El texto destaca el rol estratégico que ocupan los agricultores familiares en la soberanía y seguridad alimentarias; y define las principales políticas en cuanto a tierras y gestión sostenible de recursos naturales, fortalecimiento y diversificación de procesos productivos. También aboga por asistencia técnica y desarrollo de tecnologías específicas para el sector y por la creación de infraestructura rural necesaria para fortalecer el arraigo o incentivar a quienes quieran instalarse en el campo y trabajarlo, áreas que incluyen servicios públicos relacionados con la salud, la educación, la cultura, el deporte, la promoción y el desarrollo social de y para todas las edades.

En tanto, en su artículo 19 la norma prevé la suspensión de los desalojos de familias campesinas con derechos adquiridos, a pesar de que no cuenten con la titularidad sobre esas tierras.

Dado que la nueva ley considera a la tierra como un «bien social», crea un banco de tierras para el desarrollo de emprendimientos productivos que promuevan el arraigo rural, de manera articulada con provincias y municipios.

También incluye la creación de un Centro de Producción de Semillas Nativas, cuyo objetivo será promover su uso, acopio, producción y comercialización de las mismas. El organismo, además, promoverá la investigación y la preservación de las variedades que forman parte del proceso de selección realizado por los pueblos originarios, comunidades campesinas y pequeños agricultores.

En el marco de la 3° Reunión del Consejo Nacional de Agricultura Familiar del 2014 que se desarrolló la semana pasada en la sede del Ministerio de Agricultura y Ganadería de la Nación, el ministro Carlos Casamiquela, junto al jefe de Gabinete de Ministros, Jorge Capitanich, había anunciado que el presupuesto destinado al (todavía ese día) proyecto de Ley de Agricultura Familiar será de $1.500 millones.

22 de diciembre de 2014