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23/04/2018

Un Rollo más por Hectárea

Ensayos simultáneos en ocho lugares diferentes arrojaron un promedio de rendimiento adicional de 510 kilos/ha siguiendo ciertas pautas de manejo. Los técnicos indican que la fertilización foliar aumenta la producción de kilos por hectárea.
La fertilización foliar es una práctica que promueve incrementos de producción de raciones por hectárea disminuyendo los costos fijos de la materia seca producida.

Una serie de pruebas a campo realizadas en ocho sitios diferentes de las provincias de Córdoba y Santa Fe revelaron que la aplicación conjunta de una combinación balanceada de macro y micronutrientes aplicados en forma foliar, dio una respuesta promedio de 510 kilos de materia seca por hectárea, es decir un rollo adicional de alfalfa por hectárea de cultivo.

Por otra parte, la fertilización granulada a base de nitratos es una alternativa para refertilizaciones con gran impacto en la productividad y persistencia de las pasturas, ya que mientras esa fuente es prácticamente neutra en lo que se refiere al pH de los suelos, otras fuentes tienden a producir acidificación y esa condición es una de las principales limitantes para el cultivo de alfalfa. Un suelo de pH 6 puede disminuir hasta un 50%el rendimiento de esta leguminosa y, por debajo de esos niveles, la caída es más abrupta.

Para la ingeniera agrónoma Lucia Casco, responsable técnica de la empresa Yara para la provincia de Santa Fe: “La situación es grave si se tiene en cuenta que los suelos de la pampa húmeda en general están manifestando pH relativamente bajo, debido a la extracción de bases y al uso de ciertos fertilizantes nitrogenados que a través del proceso de nitrificación del amonio liberan iones que pueden producir acidez en el suelo, por eso es fundamental emplear fertilizantes que utilicen al nitrato como fuente de nitrógeno”.

Balance de Nutrientes. Por otra parte está demostrado que la aplicación balanceada de nutrientes, tanto a la siembra como en refertilizaciones, genera un aumento de productividad, permite anticipar la oferta forrajera, mejora la calidad y favorece las eficiencias en el uso de otros insumos importantes de los sistemas productivos.

La provisión adecuada de bases nutricionales como calcio y magnesio favorece un incremento en el volumen de rendimiento, mientras que la aplicación de fósforo y azufre incrementa la producción de materia seca, mejora la persistencia de la pastura, promueve una mejor nodulación y mejora la eficiencia de uso de agua asociada al desarrollo radicular prominente.

Fertilización Foliar. Como complemento, la fertilización foliar es una práctica que promueve incrementos de producción de raciones por hectárea disminuyendo los costos fijos de la materia seca producida. En este sentido cabe destacar que el resultado de los 510 kilos adicionales de materia seca por hectárea obtenido en los ensayos mencionados se logró a partir de una fertilización foliar que incluyó boro, nitrógeno, fósforo, potasio, cobre, manganeso, molibdeno y zinc.

Para Casco, “es necesario acompañar la producción de alfalfa de alta performance con paquetes tecnológicos para cada condición, con fertilizantes eficientes y sustentables. A través del aporte balanceado de nutrientes se debe buscar potenciar el rendimiento, así comomejorar las propiedades del suelo de manera de constituir un aporte positivo al sistema productivo a través de los años”.

Por María Rovere para Super CAMPO.

 

 

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